“Apuntes para encontrar la identidad iqueña”.
Juan Ladislao Ramírez Chacaltana
2019
“No sé cómo puede vivir quien no lleve a flor de alma los recuerdos de su niñez”.
MIGUEL DE UNAMUNO
Introducción
En el II Congreso de Historia del Perú, se dividió la Pre- Historia Andina, en cuatro períodos y tres Horizontes Culturales, con sus edades correspondientes, registrados con el método del Carbono Catorce. En el Horizonte Medio (900 – 1200 DC.) los destacados arqueólogos nacionales y extranjeros, denominaban a éste tiempo con el nombre de gran fusión, caracterizado por la expansión de la Cultura Tiahuanaco. Ica es la cuna de dos grandes Culturas Pre- Incas. Aquí Sawyer, Wallace y Menzel, hallaron gran cantidad de cerámios, textiles y variedad de plantas domesticadas de los tiempos de la Cultura Paracas, Nasca y las influencias Tiahuanacoides. En el horizonte tardío, los pobladores de los desiertos costeños, utilizaron el sistema original de las hoyas de cultivo; para contrarrestar la escasez de agua, aprovechando la humedad. Los antiguos iqueños sembraron maíz, camote, pallares, calabazas y otras plantas precolombinas, que sirvieron para el sustento en la época del Tahuantinsuyo. Entonces ¿A qué se debe tanta discriminación a la gente del ande, en la Región Ica? si sus habitantes originarios, se habían remontado hacia sus cabeceras de cuenca y volvían por el particular centralismo Peruano a la costa y a Lima. La pregunta anterior, se hace más actual al iniciar el siglo XXI, ya que, la provincia, capital de la Región del mismo nombre, ha soportado las dos últimas oleadas migratorias, la primera como consecuencia de la violencia política que vivió el Perú en la década de los 80 y parte de los 90, y la segunda como parte del verdor del desierto, a través del bombeo de agua del subsuelo, conocido también como el boom agroexportador, que se inicia a finales del siglo XX.
En el tema educativo, cobra vigencia el bullying discriminatorio, el mismo que sufriera Arguedas y que nos lo cuenta en el Primer Encuentro de Narradores Peruanos (1965), en su discurso nos dice: “Ingrese a la Universidad y nunca fui tratado como serrano en San Marcos. En donde sí me trataron como serrano y con mano dura fue en el Colegio “San Luis Gonzaga” de Ica, pero yo también los traté con mano dura. El secretario del Colegio, que se apellidaba Bolivar, me dijo cuando vio mi libreta con veintes: ¡estos serranitos!, siempre les ponen veintes en las libretas porque recitan un versito cualquiera, aquí lo voy a ver sacar veintes”. Me vio y batí el récord de los veintes en toda la historia de “San Luis Gonzaga”, porque era una responsabilidad del serrano hacerlo y lo hice”. Precisamente en su cuento OROVILCA, José María nos presenta un bully (matón o bravucón), representado por el personaje Wilster, quien para acosando a Salcedo, el Tayta tenía la edad que tienen los alumnos que cursan el primero y segundo año de secundaria. Por otro lado, en la parte sentimental, los alumnos que tienen 12 y 13 años, podrían estar siendo afectados en la parte emocional, al no ser aceptados por sus compañeras, quienes todos los días reciben de la televisión modelos extranjeros, siendo alienadas completamente. Las perspectivas educativas actuales, consideran el aspecto emocional además del intelectual, entonces de lo que se trata es de crear espacios donde no existan diferencias.
La familia, el barrio y la escuela están desconectados de la formación de las nuevas generaciones de Iqueños, agravándose más esta problemática, porque las mujeres madres solteras trabajan en su mayoría en los fundos agrícolas, otras fuera de Ica, dejando a sus hijos abandonados totalmente. Son familias en crisis, en la que se presenta maltrato infantil, dificultades económicas, excesiva presión laboral, cambios en la constitución familiar, hacinamiento, desempleo, agresión física o sexual a algunos de los miembros. Es por ello que en un test aplicado a los alumnos de un colegio de Parcona (Distrito más poblado de Ica) arrojó como problema número uno: depresión y ansiedad en los alumnos, seguido de bajo rendimiento escolar. Ya lo había planteado Tzvetan Todorov, en su libro “La conquista de América”, él refiriéndose a la identidad escribió: “La diferencia se degrada en desigualdad; la igualdad, en identidad”. Es necesario tomar en cuenta el significado de la palabra Identidad; para amar a Ica, al Perú, rescatar su verdadera historia, tradiciones etc.
Macera, nuestro historiador congresista, ha dicho que “el problema no es de identidad sino de autoestima”. Sabemos quiénes somos; el problema es que no lo apreciamos mucho. El Perú todavía no supera el trauma de la conquista vivida en 1532, continuándose todavía extirpándose las “perversas idolatrías” de los naturales (desconociendo su cosmovisión), no tomamos con seriedad a los afroperuanos, aquellos que vivieron una larga temporada en las haciendas costeñas (rancherías). Lo único que nos queda es la lengua cariñosa. Don Alberto, un amigo mío, ha dicho del Runasimi: “Es lengua para la tierra, para enamorar a la tierra, para el agua, para hablarle al sol y a los vientos. Lengua para enamorar también a las bellas muchachas que pasan risita, risita, asicha, asicha”
Etimología de la palabra Ika
Ica, proviene de dos vocablos collas, también conocidos como Aymaras, dichos vocablos son: K´ullu, que significa madera, raíz gruesa de las plantas HUARANGO y el adjetivo LLIKA - que calificaba a Yaku (agua) – que significa transparente. Las voces collas provienen del nombre del curaca de Ananika Coyuculica (nombre escrito en castellano). Llika, hace referencia a la cantidad de lagunas que existían en Ica.
“La Crónica del Perú”, es un libro escrito por Pedro Cieza de León, en el capítulo LXV, a su paso por Ica escribe: “Como en la mayor parte de estas provincias se usó poner nombre a los muchachos, y como miraban en agüeros y señales”. En el desarrollo describe “los nombres que les ponen y ellos usan son nombres de pueblos y de aves, o de hierbas o pescado. Y esto entendí que pasa así, porque yo he tenido indio que tenía por nombre Urco, que quiere decir carnero; y otro que se llamaba llama, que es nombre de oveja; y otros he visto llamarse Piscos, que es nombre de pájaros”. En conclusión, el nombre del Cacique Coyuculica, era nombre de pueblo, ya que Ezequiel Sánchez Elías en su libro: “Cuatro siglos de Historia Iqueña”, en el capítulo uno, para referirse a la abundancia de huarangos escribe: “Valle de clima cálido, con tierras de exuberante fertilidad, lleno de recursos alimenticios, estaba cubierto, en gran parte, por huarangos y árboles frutales a cuya sombra y a orillas de las acequias, o esteros, vivían los yungas”.
Para fundamentar el siguiente vocablo, me voy referir a la visión que tuvo de Ica, nuestro querido José María Arguedas. Blanca Varela, en un artículo publicado en 1962 nos dice: “Dos mundos se abrazan y no pueden separarse más y crean otro, el del poeta que relata con voz castellana lo que vivió en quechua”. La primera lengua de Arguedas fue el quechua de Ayacucho sur, en tal sentido su cosmovisión al llegar a Ica era otra, por lo tanto al escribir su hermoso cuento “Orovilca”, le pone el nombre de una laguna, debido a que, uno de los Dioses naturales de los Incas era el mar o mamacocha, diosa madre de los lagos o del agua, incluso, en una carta de fecha 19 de noviembre de 1942, dirigida a su hermano Aristides dice: “ Yo estuve bastante mal por el exceso de trabajo y pude conseguir unos ocho días de licencia para ir a bañarme a La Huega”. Ésta era otra laguna ya desaparecida. Los Iqueños muy aplicados al pensamiento occidental o hablantes del castellano, hemos desaparecido nuestras lagunas y le dimos una estocada final a La Huega, convirtiéndola en un basural. Los historiadores señalan que en Ica existieron más de 12 lagunas, siendo mi tierra Ika una ONTIGOLA (manantial de agua que brota de la tierra). Existen coincidencias con los estudios del Doctor Sebastián Barranca, él extrajo la raíz “IK” del quechua cusco Collao, cuyo significado corresponde a “río, pozo y laguna”.
ICA EN LA HISTORIA DEL PERÚ
La historia de Ica, está atada desde la época Pre-incaica con Lima, la actual capital del Perú. En la Época Colonial también se mantuvieron estos lazos, tal vez por su cercanía, no olvidemos que el primer alcalde de Lima fue Don Nicolás de Ribera, el viejo, encomendero de todo la parte baja del valle de Ica. En la República, siendo San Martín el protector de la libertad del Perú, creo el Departamento de la Capital, el 04 de agosto de 1821. La primera Constitución del Perú, promulgada, el 12 de noviembre de 1823, dividió el territorio del país en Departamentos, constituidos por Provincias y estas por Distritos, formados por caseríos que fueron los antiguos pagos coloniales. Según esta demarcación, que hasta la actualidad existe, con el nombre de Regiones, la provincia de Ica formó parte del nuevo Departamento de Lima.
Mediante Decreto Dictatorial del General Ramón Castilla, del 25 de junio de 1855, se separó Ica del Departamento de Lima con el nombre de Provincia Litoral, cuya autoridad política fue un Gobernador.
Mediante Decreto Supremo, de fecha 30 de enero de 1866, se creó el Departamento de Ica, el cual quedo ratificado por Ley del Congreso, el 30 de octubre de 1868, incluyendo a dos Provincias: Ica, capital la ciudad de Ica y la de Chincha, capital Pisco. En el año 1,900, el Congreso da una Ley, separando a Chincha de Pisco, creando la Provincia de Chincha, con su capital Chincha Alta y la Provincia de Pisco, con su capital Pisco.
Como se puede notar, las primeras creaciones se hacen en la parte norte de la Región, debido a, lo que venía ocurriendo en el país. El pago de la deuda interna contraída durante las guerras de la independencia se comenzó a hacer efectivo a partir del año 1850. En los años siguientes, la hacienda tendría mucho poder político y económico, debido al proceso de recomposición de la clase alta. Así lo señala Alberto Flores Galindo en su libro: “República sin ciudadanos” .La Provincia de Nasca, ubicada en la parte sur, recién se crea en el año 1941, Por Ley del Congreso, siendo su capital, la ciudad de Nasca y adjudicándole los Distritos de Nasca, Ingenio y Changuillo. En el año 1964, se crea la Provincia de Palpa. En la actualidad las Provincias de Palpa y Nasca son las Provincias más pobres de la región y es a partir de Palpa donde empieza la relación con el sur de país, con Ayacucho, con Cuzco, con Arequipa, Puno etc. En tal sentido, cobra vigencia lo dicho por Mariátegui: “El sur es fundamentalmente serrano. En el sur, la costa se estrecha. Es una exigua y angosta faja de tierra, en la cual el Perú costeño y mestizo no ha podido asentarse fuertemente”.
Época Precolombina
Las últimas publicaciones de lingüistas e historiadores, señalan que las tribus que habitaron Lima eran de origen Aymara. El Padre Villar Cordova hace mucho tiempo lo señaló y fue Don Arturo Jiménez Borja quien lo cita en su artículo “Lima Prehispánica” (1). “Aymaras fueron los antiguos Yauyos, los de Huarochirí, Canta y Cajatambo”. En el mismo documento se indica que, la tribu Pre- Inca los Huanchos, dejó muchos nombres para la toponimia local, entre ellos Lurigancho o mejor dicho Hurin-huancho, debo resaltar la voz hurin , pues la forma como estaba dividida Ika antes de la llegada de los españoles era: Anan Ika y Lurin Ika. Esto se puede verificar en el primer libro del Cabildo de la Ciudad de Lima de la que fue su primer alcalde, Don Nicolás de Rivera, el viejo, en dicho documento dice a la letra: Don Juan de Barrios, Encomendero de Ananica y Don Nicolás de Ribera, Encomendero de Lurinica, siendo este documento oficial el más antiguo que se conoce.
María Rostworowski de Diez Canseco, estudiosa de la época Inca, señala que debido a la configuración del Valle y a su topografía, la colocación de la dualidad Anan (alto) y de Lurin (bajo) en la costa central fue este-oeste, indicando también que Lurin se ubicaba en el oeste, relacionando al mar, la orilla y la playa, e indicaba la franja de tierras bajas en relación con la cordillera y las quebradas. Hasta la actualidad existe Lurín al sur de Lima (Muy cerca al mar) y Luren al sur de Ica, por lo expuesto, hurin, fue escrito por los españoles de acuerdo a como lo escuchaban, el sonido fonológico fue primordial, en muchos de los casos, lo quechuas que aprendieron el castellano, confundieron al hablar la “i” por la “e”.
José Antonio del Busto, en sus obras escogidas “Perú Preincaico”, escribe acerca del hombre de Paracas, descubrimiento hecho por el Francés Federic Engel, “el hombre de la pampa de Santo Domingo es el más antiguo habitante conocido del litoral peruano. Cultivador de calabazas, pescador y recolector, su antigüedad es de aproximadamente 5750 años a. C. A su costado se encontró una flauta con decoración que sería la primera expresión musical del Perú milenario; también, algunas redes para pescar, hechas de fibras de cactus, posiblemente las redes más antiguas del mundo que se conserven” (2).
Los Nascas según Julio C. Tello, se extendió a lo largo de la costa del Departamento de Ica, entre los valles de Chincha por el norte y Acarí por el sur, siendo su límite oriental el país de los Lucanas. La región Ayacucho tiene en la parte sur tres provincias (Lucanas, Parinacochas y Paucar del Sara Sara), ellas no tienen conexión vial por los andes, que le permitan llegar a la capital de la Región Huamanga, teniendo que bajar hacía Nasca, de ahí dirigirse a Pisco para ascender vía la carretera Los Libertadores hasta la capital de Ayacucho. Lo mismo pasa con los Distritos del sur de Huaytará (Provincia de Huancavelica) quienes tiene una relación natural con la costa, es decir, con Ica. Hoy se sabe, que los Nascas y los Paracas se remontaron hacia sus cabeceras por encima de los 4,000 msnm. Abarcando los Departamentos de Ayacucho y Huancavelica. José C. Mariátegui, en sus siete Ensayos dice: “El departamento es un término político que no designa una realidad y menos aún una unidad económica e histórica”. A Don Alberto Benavides, una vez le escuché decir: “El Perú ha fracasado; hagamos otro”.
Conquista
Algunos apuntes sobre la llegada de los Incas.
El Horizonte Tardío Iqueño, empieza con la Conquista de la Provincia de Ica por los Incas, etapa que empieza aproximadamente en 1400 y culmina en 1539. Los Incas establecieron su centro administrativo en el pago de Tacaraca, Ica La Vieja, en unas de las huacas de la hacienda Galagarza y gobernaron el valle por medio de la nobleza Iqueña. El lugar es el más conocido de los yacimientos arqueológicos de Ica, que fue estudiado por Uhle.
En aquellos tiempos de la conquista incaica, hubo cuatro estilos nativos de la cerámica de la costa sur del Perú, denominados Chincha, Ica, Poroma y Acarí, existiendo estrecha relación geográfica entre sus valles y sus tradiciones.
En ese mismo periodo, de PACHACUTEC y su hijo Túpac Yupanqui, los cusqueños habían pisado tierra Iqueña siguiendo la ruta: Cusco, Vilcashuamán (Ayacucho), Huaytará (Huancavelica), Tambo colorado (en Pisco), Tambo de Mora (en Chincha), para luego dirigirse hacia Pachacamac (en Lima).
Algunos apuntes de la llegada de los españoles.
El conquistador Don Francisco Pizarro, llegó a Ica mucho antes de la fundación de Lima, después de su afanosa búsqueda del sitio apropiado para fundar la Ciudad de los Reyes. Muchos estudiosos de la historia iqueña señalan que fue la zona de Sangallán (Pisco), la elegida antes que Lima, perdiéndose Ica, la posibilidad de ser el centro neurálgico del Virreynato. Hecho que probablemente no prosperó, debido a que, los dominios o territorios otorgados por el Monarca español - La Nueva Castilla - indicaban: “Desde el bordo izquierdo del Río Santiago (Colombia), hasta Lurín” actual Distrito de Lima. Pizarro siempre ambicionó la posesión de Ica, por ser un territorio amplio y hermoso, muy cercano al mar. En tal sentido, envió a dos hombres de su confianza: Nicolás de Ribera, un conocido suyo, apreciado por su carácter y notoria adhesión, pues él nunca se apartó de Pizarro, fue uno de los trece de la isla del gallo - en realidad eran catorce, no se menciona al negro Alonso Prieto - y aceptaba todas las disposiciones que daba el conquistador, asignándole la parte baja del valle de Ica. El otro hombre de confianza se llamaba Juan de Barrios, quien recibió como encomienda la parte alta del valle. Con ésta decisión, la primera que tomaba, demostró que para sus mejores hombres, le otorgaba, las mejores tierras. Alonso Cortez G., escribe un artículo en la revista “Tiempos”- Edición conmemorativa del cuarto centenario- de fecha 17 de junio de 1963, en la cual asegura, que ambos encomenderos usaron métodos tan diferentes a los que impusieron sus otros compañeros de conquista. En la Síntesis de hechos y fechas notables de la historia de Ica se lee: “El 1º de setiembre de 1534, en Pachacamac - algunos trabajos extras indican por error Jauja – Don Francisco Pizarro, entregó a su mejor amigo Don Nicolás de Ribera, El Viejo, la Encomienda de Ica (Urin – Ica), llamado también Ocachi”.
No fue la posesión del Cuzco la que origino el distanciamiento de los conquistadores sino Ica, porque su dominio territorial de Diego de Almagro comenzaba desde Lurín hacia el sur – La Nueva Toledo - . Por eso, funda el pueblo Santiago de Almagro de Chincha baja, después de su viaje hecho a Chile, lo hace para impedir que Pizarro avance hacia el sur, haciendo lo propio en Ica y funda el actual Distrito de Santiago al lado de La Venta (Asiento del Encomendero Nicolás de Ribera, el viejo, hombre de confianza de Francisco Pizarro). Toda la disputa se debía a que Ica tenía semejanza en su clima y otras cosas más con la lejana Andalucía, ambos conquistadores también buscaban descanso y seguridad.
Cuando se estableció la diferencia entre Pizarro y Almagro por el límite de sus respectivas gobernaciones, convinieron en confiar la solución del desgraciado pleito al provincial de la orden mercadería Fray Francisco Bobadilla, en la primera sentencia del religioso emitida en Mala, un 15 de noviembre de 1537 sale favorecido Pizarro. José Antonio del Busto cita el mismo fallo, en su libro “La Conquista del Perú” nos dice lo siguiente: “Pese a todo, el 15 de noviembre de 1537 el provincial Bobadilla falló que el Cusco- hasta la definitiva opinión de los pilotos encargados de fijar su exacta posición astronómica- pertenecía a Francisco Pizarro y que, por tanto. Almagro debía devolver la ciudad: si el posterior fallo de los pilotos situaba la población en jurisdicción de Toledo. Pizarro se la entregaría. Por lo demás ambos gobernadores deberían disolver sus tropas o por diferente camino llevarlas a guerrear contra Manco Inca: Finalmente, Almagro desplazará su reciente fundación de Chincha a Nasca, para evitar caer así en los términos de Lima”. Transcribo parte de la primera sentencia: “….por ende. Mando que el dicho D. Diego de Almagro é su gente se retire é retraiga al valle é cacique de la Nasca, dentro de nueve días después de la data de esta mi sentencia primera siguientes, é no pase del valle de Ica para acá, la vía de la ciudad de Los Reyes, ni sus provincias, pues en este valle é sus comarcas hay muchos mantenimientos para la gente, é mucha tierra para ir a pacificar, hasta tanto que la declaración de los dichos pilotos, o su Magestad otra cosa mande…”.
Colonia
La Colonia fue la época del Perú, donde La relación Ica - Lima continúa, no encontrándose una relación espiritual ni con los españoles, ni con los del Cusco, que tenían el control político antes de la conquista. Don Alejandro Pezzia Assereto, en su libro “Ica y el Perú Precolombino” (3) señala: “los españoles llegaron a Ica el año 1534 poniendo fin al control político de los Incas, pero no establecieron inmediatamente una administración organizada y, durante varios años el control español estuvo bajo sus dos Encomenderos quienes vivieron en Lima y llegaron al valle para exigir tributos y servicios a los caciques”.
En 1560, llega una misión Franciscana a la parcialidad de Lurín Ica. Este hecho viene a constituirse como la primera administración directa hecha por los españoles. Estando en Ica, reunieron a los indígenas en reducciones y más tardes e fundo una villa española gobernada por un corregidor. Los naturales de Ica recuerdan el año de 1560 como el de la Conquista por los Españoles. Siendo el convento más antiguo, según su cronista Córdova Salinas, se funda con el nombre de Convento de San Antonio de Padua, ellos son los fundadores de la actual parroquia de Luren.
En 1583, se funda el Convento de San Agustín de Ica, según su cronista el Padre Calancha, fue fundado por el Padre Fray Vicente Vera, durando hasta el 24 de setiembre de 1872, fecha en que fue clausurado por el Congreso, pasando sus bienes a la Institución Educativa Secundaria “San Luis Gonzaga”.
“La orden de los Jesuitas fue fundada por San Ignacio de Loyola, caballero español, para instruir a los ignorantes, convertir a los infieles y defender la fe Católica contra los herejes. Es conocida bajo el nombre de sociedad ó compañía de Jesús. Fue aprobada o más bien instituida por Paulo III el 27 de setiembre de 1540 por la bula Regimini militantes Ecelesia, confirmada por mucho Pontífices posteriores. Su instituto fue declarado piadoso por el Concilio de Trento”…. (4). Llegaron al Perú en 1557, en todos los lugares donde se establecieron esparcieron la fe cristiana, teniendo por norma la enseñanza, tal cual mandan sus principios (instruir a los ignorantes). Ellos hicieron varias fundaciones en Ica, establecieron las haciendas que eran centros administrativos de gran importancia, estuvieron presente en todos los valles de la Región actual: En Ica, Nasca, Chincha y Pisco (En Pisco su hermosa iglesia se vino abajo en su totalidad, en el terremoto de agosto del 2007), En el misterioso valle del Ingenio – la hacienda San José del valle del Ingenio, cuyo origen se remonta a 1546. Su iglesia se resiste a borrar las huellas de estos hombres, manteniéndose en pie. En Ica provincia, edificaron el Convento y el Colegio de San Luis Gonzaga (Infraestructura que mantiene sus portales antiguos, lugar conocido como el patio central de la Universidad Nacional, a su costado construyeron el templo de la Compañía de Jesús – actual catedral, en reconstrucción – estrenándose en 1759. Los Jesuitas estuvieron en Ica hasta el 27 de febrero de 1767, fecha en que fueron expulsados del Perú, por el Rey de España.
En el capítulo IV, del libro “Origen y Fundación del Colegio e Iglesia de San Luis Gonzaga de los Jesuitas de Ica”, Don Cornelio Quijandría Alvarez (5) nos cuenta una historia muy dolorosa , que demuestra como actuaba el Tribunal de la Santa Inquisición, se parece a la actual justicia que todavía se imparte en el Perú, resulta que Don Juan de Loyola Haro de Molina, fue acusado injustamente de hereje, el 15 de abril de 1743, por su esclavo Diego de los Ríos, ante el Tribunal de la Santa Inquisición , lo tomaron preso, con el embargo de sus bienes, el 9 de julio del citado año, siendo recluido y remitido a Lima el 8 de agosto del mismo año. En agosto de 1945 otorga todos sus bienes que tenía en Ica, a la Compañía de Jesús, congregación que se iba a establecer en nuestra ciudad, con cuyos bienes debía sostenerse la Institución Educativa “San Luis Gonzaga”. Fue ejecutado el 27 de diciembre de 1745, siendo sepultado secretamente en el convento Santa María Magdalena. Al comprobarse su inocencia fueron sacados sus restos, para ser enterrados en la Iglesia de San Pablo de los Jesuitas, el 6 de noviembre de 1749, dándose cumplimiento a su deseo de ser sepultado ahí.
Al comprobarse la inocencia de Don Juan de Loyola, por la misma propaganda que hacia el denunciante, quien se jactaba de ser el autor de la prisión y de la libertad de todos los esclavos de Loyola. Fue preso con todos los demás testigos del proceso, todos lo acusaban de judío. El proceso o caso Loyola, fue el más ruidoso que conoció la Inquisición por haber resultado injusto, teniendo que realizar el Tribunal de la Inquisición, una procesión de desagravio, sacándose su estatua en procesión pública, que se realizó el 7 de octubre de 1749.
El Corregimiento de Ica.
Durante la Colonia, el territorio peruano, fue dividido en Corregimientos, los mismos que eran gobernados por autoridades que se denominaron Corregidores, quienes tenían atribuciones políticas y judiciales. Los corregidores residían en las ciudades capitales de los corregimientos. El primer corregidor de Ica, fue el fundador de la ciudad Don Gerónimo Luis de Cabrera, quien sostuvo por tres años el Cabildo falto de rentas.
La Intendencia de Lima.
Con la aplicación de la Cédula Real de 1786, se divide el territorio peruano en grandes regiones llamadas Intendencias, se suprime el corregimiento de Ica, pasando a ser Partido o Subdelegación de la Intendencia de Lima, con el gobierno a cargo de un Subdelegado Real. El último Subdelegado fue el Conde de Monte Mar, quien a la llegada de la expedición libertadora del General Arenales a Ica, huyó a Nasca con las fuerzas realistas del Coronel Manuel Quimper, lugar donde fueron derrotados. El 14 de octubre de 1820, se realiza la de Nasca, una feroz batalla, siendo la primera que se libró luego del desembarco de San Martín en Pisco. Algunos estudiosos señalan que la batalla entre las fuerzas comandadas por el Coronel Manuel Rojas (Patriotas) y las del Coronel Manuel Quimper (Realistas), tuvo lugar en Changuillo. Otros indican que fue en Palpa (alcance que dio Rufino Guido a los realistas), en la observación de algunos documentos, se indica que solo se trato de un tiroteo lo que pasó en Palpa, ya que, los realistas rehusaron al enfrentamiento dispersándose por entre los cerros.
Emancipación
Existen dos posiciones en torno a la independencia del Perú, algunos manifiestan que fue concedida, otros han dicho que fue obtenida, y la respuesta iqueña va por el lado de la obtención. Juan José Salas representa a los hacendados, que cansados de servir a otros, querían obtener poder a costa de todo, para ello utilizó todo el dinero que tenía. Francisco Javier Mariátegui dijo de Salas lo siguiente: “El Dios de Salas fue la plata, por lo que sacrificaba todo, pero no para guardarla sino para gastarla y habría gastado el valor de lo que más quería si el objeto de su cariño hubiese sido vendible”. Fue acusado de traidor y deportado por San Martín a Chile, debido a que , cuando las tropas patriotas marchaban hacia la sierra, él se comunicaba mediantes cartas con el Virrey , informando el estado débil en que quedaba Ica, aconsejando , instando, a que mandasen tropas los españoles desde Lima, para que por sorpresa se apoderasen de la Provincia. Por lo sucedido, también llego a tener problemas con Bolívar, empezaron a desconfiar también de él, los que vinieron por el norte. En Ica continuaba su liderazgo entre los hacendados.
El mismo Juan José Salas, jura la Independencia del Perú en Ica, un 21 de octubre de 1820. En la historia está registrada, como la primera proclamación de la Independencia Nacional, luego que San Martín y la expedición libertadora del sur desembarcara en Pisco (6). El acto contó con la presencia del General Juan Antonio Álvarez de Arenales, en una carta que dirige Juan José Salas – era aficionado a escribir cartas - a San Martín, con fecha 20 de octubre dice que “ya está jurada la Independencia Nacional con mucha solemnidad”
¿Por qué se frustra la revolución emancipadora que debió hacerse en las intendencias de Arequipa, Cusco y Puno? ¿Por qué San Martín se ve obligado a cambiar su frente de batalla, ordenando a la división del General Arenales se trasladase por los abruptos senderos de la sierra hacia el norte de la capital del virreinato?. En Ica se ha dicho, que viajó una comisión a la ciudad de Pisco, para pedirle a Arenales y San Martín, que no los abandonasen entre dos fuegos por que necesariamente tendrían que rendirse a los realistas. San Martín no los escuchó y se reembarcó, conduciendo su Expedición Libertadora a los valles de Chancay y Huaura, con el fin de entrar por el norte a Lima.
Después de Jurar la Independencia del Perú el 28 de julio de 1821, el Protector San Martín destacó nuevamente a Ica una División a órdenes del General Domingo Tristán, y el Coronel Agustín Gamarra como jefe del Estado Mayor.
Batalla de Macacona
La Hacienda Santa Teresa de la Macacona, era un antiguo fundo de los Jesuitas (fue rematada en sesentidos mil cuatrocientos pesos a Don Rafael de Salas, padre del General) y en aquel entonces propiedad del General Juan José Salas. En ese mismo lugar, se libro una batalla entre Los realista y Los patriotas, fue un 07 de abril de 1822, comandaba las tropas realista el General José Canterac, que había descendido de la sierra por Los Molinos proveniente de Huaytará. Los patriotas, luego de ser informados erróneamente que los realistas disponían de cuatro mil hombres armados, decidieron emprender la retirada a Pisco y Chincha ¿Quién dió la información errónea? Rodolfo Chalco Cueto en su libro “Historia de Ica” (7) narra con detalles lo acontecido: “Los patriotas pasarían por Macacona, después de la medianoche. Los realistas se informaron tanto de la retirada como del lugar por donde pasarían, tendiéndoles una mortal emboscada. Cuando los patriotas pasaban por Macacona, a la una de la madrugada, fueron atacados desde los matorrales y de todos los frentes. Era noche de luna radiante. Los patriotas quedaron imposibilitados de defenderse. El enfrentamiento duró dos horas. Mil patriotas fueron tomados prisioneros y solo lograron escapar algo más de doscientos, entre ellos el General Tristán y el Coronel Gamarra, quienes se dirigieron a Pisco, acampando en caucato. Algunos de los prisioneros fueron fusilados en el acto, aún cuando Canterac lo negó posteriormente”.
El 5 de mayo del mismo año (1822) es fusilado en la plaza de Ica, el guerrillero patriota Cayetano Quiroz, capitaneaba un grupo de guerrilleros en Ica, unidos a la fuerza de Tristán y Gamarra. Fue derrotado por el Brigadier Carratalá, huyendo Quiroz a Pisco, en donde fue detenido y enviado a Ica.
Los iqueños deben revisar esta parte de su historia, ya que en ella existe una gran verdad, ya expresada por José de la Riva Agüero, que está relacionada a la actitud tomada en su momento por los criollos, en este caso Juan José Salas, quién sólo quería mantener sus privilegios, bien con la colonia o en la república, cosa que lo consiguió, como ya veremos más adelante en la “Guerra de los Generales”. Riva Agüero en su epílogo de “La Historia en el Perú”(08) nos manifiesta: “El alma nacional no se improvisa, no surge de repente de la nada al conjuro de un individuo o de una generación, sino que vive de la misteriosa comunidad de los siglos: es la suma de lo que de mejor hay en nosotros, de nuestros más altos y generosos anhelos, agregada a los de nuestros padres y antepasados y a los de todos los que nos precedieron en estas tierras cuya configuración y cuyas influencias determinan, del propio modo que en las restantes del orbe”.
“El protomédico indígena Don Gabino Chacaltana - que era en ese entonces director del Anfiteatro Anatómico de Lima, y gran cirujano - se reunió en 1808 (Lima) con los peruanos más eminentes de la época, para tratar de insurreccionar al país, fue denunciada la conspiración al Virrey Abascal, muriendo el protomédico de la libertad, tan solo del dolor de ser descubierto, sin ver que la chispa revolucionaria brotada de su alma rebelde, no hubiera incendiado aún al continente”. En 1813, otra reunión se realiza en Ica con el mismo propósito de hacer oposición a los partidarios del Rey, esta vez propiciada por el Alcalde del Cabildo indígena de Hanan, Don Ignacio Chacaltana, en dicha reunión estuvieron el Dr. José María Maúrtua, el Plesbítero Don Faustino Guerrero, con sus hermanos Don Zenón y Don Fulgencio, Don Pedro Polo, Don Mariano Salazar y Don Jacinto y Don Juan Casavilca, se comprometieron en laborar por la emancipación americana. Se puede notar que los indígenas de Ica y del Perú, desde hace muchos años, trabajaban por ver una Patria Libre. La muestra más grande y palpable fue, la rebelión en 1780 de Don José Gabriel Condorcanqui, Túpac Amaru II. No así los criollos o personas pudientes. Victor Andrés Belaunde llegó a decir: “La sociedad colonial era un sociedad de propietarios, encomenderos, o burócratas”.
Ica inicia su vida republicana, con la presencia del libertador Simón Bolívar, iniciándose también muchas controversias, no esclarecidas aún. Mejor dicho se encuentran divididas en sus fuentes y recopilaciones, las escuelas de historia en esta ciudad, una la lidera el historiador de la ciudad Don Alberto Casavilca Curaca, quien discrepa en fechas, lugares y acontecimientos con Don Alberto Rossel Castro. Uno nacido en Ica y el otro nacido en Canta – Lima. La más sonada gira en torno a la Creación de la Institución Educativa San Luis Gonzaga. Bolívar creó el Colegio de Ciencias, por Decreto Supremo el 01 de junio de 1826, en el mismo local donde funcionó la Institución Educativa fundada por la Compañía de Jesús. Alberto Casavilca Curaca defiende y escribe que el Colegio de Ciencias ha sido “mal llamado después San Luis Gonzaga”, sin embargo Alberto Rossel Castro llegó a publicar una separata con el nombre “Historia del Colegio San Luis Gonzaga de Ica” (9). En la página 11 de la separata dice:”Ignoran lo más elemental: “que el Colegio de San Luis Gonzaga de Ica fue fundado por los Jesuitas el 22 de agosto de 1746 “. Hasta ahora la bicentenaria Institución Educativa, continúa celebrando su Aniversario de Creación el 21 de junio, fecha en que comienza a funcionar (1746). No toma en cuenta ninguna de las dos fechas en discusión.
Bolívar en Ica.
Julio Ezequiel Sánchez Elías, indica que el 17 de abril de 1825 entra triunfalmente a Ica, el libertador Simón Bolívar; permanece hasta el 22 del mismo mes. Fue colmado de atenciones. Se alojó en la casa solariega que fue de los marqueses de Torre Hermosa, frente a la plaza de armas (Hoy funciona en ese lugar el Banco Continental BBVA). Es aquí donde nace la idea de declarar la igualdad social y civil de los indígenas con todos los ciudadanos libres de la República. El inmueble donde se alojó Bolívar fue declarado Monumento Histórico Nacional mediante ley 10383, del 23 de enero de 1947. Es éste episodio de la vida de Ica aprovechado por los que tenían temor al poder, un grupo de iqueños los más pudientes lo trataban despectivamente al libertador, mientras que su mayoría lo clamaba como glorioso. Después escribiría Rossel Castro lo siguiente: “En la época Republicana. Los turiferarios de Bolívar se han empeñado, casualmente, en consignar su nombre y atribuirle hechos en los que él no formó parte, ni conquistó gloria alguna, fuera de las orgías y bailes que recibió de los Iqueños a su paso por esta ciudad, en el año de 1825, cuando se dirigía al Alto Perú para dividir geográficamente al País” . El Tacneño Francisco de Paula Gonzales Vigil, en ese mismo año en que Bolivar visitó Ica expresó lo siguiente en Lima: ¿Pretende Bolívar imponernos leyes que repudia el país y desmembrar el Perú como si fuese una herencia en subasta? El sociólogo Martín Guerra expone lo siguiente en una obra publicada recientemente, como - (en el libro testimonio – ensayo) “Canción del Silencio” (10) - redactor del prólogo explica: “que las verdaderas intenciones políticas y militares de Simón Bolívar en el alto Perú, fueron cercar a los españoles extirpándoles el dominio sobre el antiplano. Indica también que la derecha oligárquica acusó injustamente al libertador de querer dividir al Perú.
La Guerra de los Generales.
Es una de las etapas sangrientas de nuestro Perú. Hubo muchas otras, la última fue la violencia política de los 80 e inicios de los 90 (situándose las acciones más sangrientas en Ayacucho Huancavelica y Apurímac). La propia independencia fue un episodio de lucha entre Lima y el resto. Lima estuvo siempre con el Virrey. A pocos años del nacimiento de la República Peruana, el sur apoyó fuertemente la Confederación Perú Boliviana, mientras tanto, el norte, Lima e Ica ciudad estaban en contra. El historiador Carlos Contreras, refiriéndose a la derrota de la Confederación ha dicho:”la derrota de la Confederación nació de una alianza de terratenientes contra el sur andino”. Esta posible división del país existe desde la fundación del Perú como república, llegando a decirse que existen actualmente dos países encontrados, antagónicos y cargados de violencia.
El General Salaverry en Ica.
En febrero del año 1835, se rebeló contra el Presidente provisional Orbegoso, obedeció al plan que, en consonancia con su decreto de guerra a muerte al invasor, se había trazado. Deseaba salir al encuentro del Presidente de Bolivia, General don Andrés de Santa Cruz, que estimulado por Orbegoso había entrado en territorio del Perú, desde el 16 de junio del mismo año. Santa Cruz comandaba 5,000 soldados, y se enfrentó al General Gamarra en la batalla de Yanacocha, muchos otros enfrentamientos ocurrieron en las Regiones de Cusco y Ayacucho. Al salir de Lima, dejó gobernando al General Iqueño (Juan José Salas). Llegó a Ica el 15 de octubre, estuvo acompañado de su Estado Mayor y alta oficialidad, entre los que figuraba el General Juan Pablo Fernandini.
Enrique D. Tovar y R. en su libro “El Apóstol de Ica” (11), un bosquejo biográfico de Fray Ramón Rojas de Jesús María, escribe lo siguiente: “Dos veces, pues, por lo menos, estuvo Salaverry en Ica el año 1835, y se alojó en una de las mejores casas de la ciudad, la del comerciante iqueño don Francisco Oliva, situada en la calle hoy llamada de Ayacucho. Pero la familia Zorrilla puso a su disposición, su lujosa residencia, inmediata a la plaza principal, antigua propiedad de los marqueses de Torre Hermosa. Y fue allí donde la alta sociedad de Ica ofreció un gran sarao al Jefe Supremo y según una crónica de Julio Senisse, el General vestido con uniforme de gala, lucia (en la fiesta) un delicado ramillete de claveles en el costado izquierdo, prendido de la casaca gloriosa y dorada. Y a la madrugada remitió los claveles a Doña Pepita Zorrilla, diciéndole: “Han estado sobre mi corazón; guárdelos”. Su hijo, el poeta, Carlos Augusto Salaverry, no había cumplido aún los cinco años, tiempo después se convertiría en el máximo representante del Romanticismo en el Perú. Desde aquí estuvo estudiando los movimientos de Santa Cruz. El 20 de octubre emprendió la travesía hacia Ayacucho.
Una tradición, bastante escuchada en Ica es la que sigue: Fray Ramón le dijo a Salaverry cuando éste le contó sus propósitos de atacar a Santa Cruz, respondiendo el religioso lo siguiente: “Vea, General. Un consejo voy a darle aunque usted no lo pida. Espere Usted al enemigo…….Deje Usted, que ya vendrán a atacarle por aquí…La victoria será fácil. Pero si Usted se obstina en marchar al sur, saldrá perdido. Y yo amigo suyo, lamentaré lo que con Usted vaya a ocurrir. Aunque….sí aún podré ver todo lo que se piensa hacer…y tal vez tenga tiempo, para antes morir, contemplar el derrumbamiento de estas anomalías..”. Por desdicha el General Salaverry había pensado de distinto modo, y no era hombre que echara pie atrás en sus decisiones. Sabiéndose lo que ocurrió después en la acción de Socabaya. Cumpliéndose al pie de la letra, el vaticinio de Fray Ramón. En el mismo libro consultado, se narra la llegada del Padre Guatemala a Ica. Siendo recibido por Doña María Josefa Ocharán de salas (esposa del General Juan José Salas), quien lo instó a pernoctar en la Hacienda Macacona. En Arequipa triunfa Santa Cruz sobre Salaverry. Un tribunal de guerra lo condena sumariamente a muerte, también es condenado el General Iqueño Juan Pablo Fernadini y Juliani, jefe del Estado Mayor de Salaverry. El General iqueño Baltazar Caravedo, negó al principio, su voto a la sentencia condenatoria. Al ejecutarse esta en la Plaza de Arequipa, Fernandini huyó, pero al llegar a uno de los portales, lo detuvo un chileno, en esas circunstancias la tropa lo victimó a bayonetazos por la espalda.
El General Salas, rico hacendado iqueño y prominente político de esos tiempos, Domingo Elías joven agricultor, que aún no se había convertido en figura nacional, eran grandes amigos de Fray Ramón Rojas, en Ica el padre Guatemala pintó varios cuadros de la Virgen de Guadalupe. Ambos líderes peruanos eran admiradores de la obra del ilustre recoleto de Guatemala. Domingo Elías la evidenció cuando en 1841, en el local del Estanco de Tabaco, situado en la calle limeña de Chacarilla, abrió el Colegio Nuestra Señora de Guadalupe, bajo la advocación mexicana propugnada por el Padre Rojas, asociándose a los señores Rodrigo y Azcárate.
Domingo Elías y la batalla de Saraja. (1854)
En plena era del guano, el nuevo Estado peruano mostraba su debilidad. Tito Flores escribió: “La desaparición de curacas y corregidores, la postergación del clero y la debilidad de los aparatos policiales y burocráticos republicanos, permitieron que los terratenientes, a la propiedad de sus haciendas añadieran el monopolio del poder político local. Con la republica adquirieron un poder que no habían tenido antes. En el siglo XIX un hacendado podía movilizar a sus “propios indios”, con lo que formará partida de montoneros y huestes particulares. Así se conformaban los ejércitos que participaban en las guerras civiles al lado de Vivanco, Castilla o Echenique” (12)
Domingo Elías, era uno de los hacendados de mayor poder económico en el Perú, estaba dedicado al cultivo del algodón, llegando a exportar éste producto. También producía piscos y vinos. Fue aliado de Ramón Castilla, quien a través de los pagos a los bonos de la deuda interna, la manumisión de esclavos, dominaron las finanzas y la economía nacional. Lo más resaltable fueron los préstamos del Banco Central Hipotecario, dirigidos a los valles ubicados en la costa norte y central, valles que cambiaron rápidamente sus paisajes, con la expansión de la caña y el algodón.
“El pago de la deuda interna contraída durante las guerras de la independencia se comenzó a hacer efectivo a partir de 1850, se trataba de convertir en dinero contante esos “papelitos” que os Generales patriotas habían entregado, durante las guerras de la independencia, a todos, aquellos que sufrieran alguna requisa: dueños de haciendas, comerciantes, arrieros, pequeños propietarios. Con el tiempo se había despreciado esos vales y habían pasado de mano en mano. Algunos especuladores lo fueron adquiriendo y luego ejercieron toda la presión de que disponían para conseguir que el estado procediera a pagarlos. Durante la administración de Echenique alcanzaron ese objetivo. Quienes se vieron beneficiados terminaron por ser una minoría no mayor de 50 personas, vinculadas al comercio de exportación y unidos con lazos de clientela política al régimen. Todo esto ocasionó un terrible escándalo”. Elías dirige dos cartas a Echenique con fecha 12- 08- 1853 y 16- 08 – 1953, en la primera cuestiona su gestión, en la segunda lo acusa de actos de corrupción. El mismo día 16 de agosto fue apresado. Dejado en libertad por el clamor del pueblo, intentó una insurrección en tumbes, no tuvo éxito. Vuelve a su tierra natal Ica, el 21 de diciembre de 1853, entabla contacto con Castilla y se subleva contra José Rufino Echenique, el 07 de enero de 1854, en el lugar conocido como Saraja, al lado del cerro guardián de Ica. Como se puede advertir, fue el ideólogo, el antecesor de la sublevación de Castilla en 1855.
De todo este tiempo se registran algunos datos sobre Ica (Provincia). La ciudad estaba dividida en cinco calles de sur a norte y nueve de este a oeste; tenía por límite al oriente al río; al occidente el cauce de la Palma (hacienda); al norte ese mismo cauce con sus puentes del Socorro y huerta de Portal, y por el sur los caminos que repartían para Cachiche y Chacarilla del Cura de San Jerónimo. Existían algunas mansiones suntuosas y muchas casas desvencijadas, cuatro pequeñas plazas públicas. A pesar de sus ricos viñedos y de la vasta producción de otros frutos, el lugar era bastante pobre, pues las familias de fortuna, más que en la ciudad vivían en sus haciendas o se iban a Lima a pasar largas temporadas.
Ica en la Guerra con Chile.
Existen documentos, comunicaciones entre algunos hacendados y el invasor chileno, en dichos papeles se puede colegir, que actuaron traidoramente. La campiña de Ica, resistió heroicamente ante los abusos y destrozos que hacían a su paso, algunas parroquias ocultaron documentos, de otra forma no podríamos tener hoy abundante información al respecto. Ya no se movilizaban a caballo, hicieron uso del tren que recorría las distancias entre Ica y Pisco. Línea férrea que empezará a funcionar desde 1871, cubriendo 77 kilómetros de distancia, después de utilizarla constantemente la destrozaron, fue destruida parcialmente, ya que volvió a funcionar pero por poco tiempo.
El capitán Arturo Menaut, era un defensor de la patria que tomaba nota de los acontecimientos en el que participaba, él nos cuenta lo que sigue: “El día 24 de setiembre de 1882, guerrilleros descarrilan el tren que venía de Pisco y toman como prisioneros a importantes personajes, entre ellos se encontraba José Picasso, dejado en libertad luego del pago de una gran cantidad de dinero, el que fue destinado a la lucha contra el invasor chileno. También fue detenido el Comisario Rural, nombrado por los chilenos luego de haber tomado la ciudad de Ica, López Lasley, a quién se le puso a disposición del Jefe Político y Militar de los Departamentos del Centro, General Andrés Avelino Cáceres” (Ayacuchano casado con una Iqueña).
Hubo enfrentamientos en casi todo el valle, peruanos y chilenos se enfrentaron en Quilloay, Santiago, Los Molinos (…). Es precisamente en Los Molinos, en el combate de “El Cerrillo” donde surge la figura de Catalina Buendía de Pecho, ella junto a su esposo José y su hijo Hilario, participaron en la lucha contra el invasor del sur, la versión más conocida indica, que la valerosa mujer nacida en Pampa de la Isla, preparó una chicha y la envenenó con un producto conocido con el nombre de piñón, fruto de una planta que aún existe en el lugar y que tradicionalmente ha sido utilizado en pequeñas dosis como laxante. La chicha contenía una dosis mortal, pero ella bebió y brindó con los oficiales del ejército chileno. Cuando los invasores se dieron cuenta de lo ocurrido, le introdujeron el asta de una bandera en el vientre.
Rebelión Campesina en Parcona (18 de febrero de 1924)
El campo se había polarizado, por un lado estaban los hacendados dueños de los fundos La Caravedo y Bambarén, y por el otro los campesinos (trabajadores de las haciendas). Los yanaconas reclamaban sus tierras, ellos habían sido despojados de sus propiedades por los terratenientes. Pedían una indemnización justa ante las autoridades, pero no recibían la atención esperada. En la capital de la provincia, la ciudad exigía el funcionamiento de las escuelas nocturnas; pero los hacendados se negaban a ello, también se pedía el cumplimiento de la jornada laboral de las 8 horas. Frente a esta situación descrita, los campesinos liderados por Juan H. Pévez, acordaron realizar una asamblea general el 17 de febrero, siendo uno de los puntos de la agenda el tema del agua, debido a que, en la parte alta del valle, los propietarios regantes eran en su mayoría latifundistas, ellos abrían las compuertas a sus chacras, dejando sin agua a los pequeños propietarios de la parte baja del valle. El agua de avenida había tardado en llegar, creándose un problema en los pueblos de Parcona, Tate, Pachacutec y Pueblo Nuevo. El cauce La Achirana, que había sido construido para irrigar tierras comunales de la parte baja, con la escasez de agua permanecía seca, y los administradores del agua eran sobornados con el dinero de los dueños de las haciendas, la corrupción por el agua había comenzado.
Lo que venía ocurriendo en el campo repercutía en la ciudad, en ambos lugares acuerdan unirse. Era el año de la fundación del APRA, y la dirigencia del campesinado parconense establecía una alianza con el Centro Obrero Iqueño. La asamblea del 17 en Parcona, se postergaba para el 18, luego se unirían ambas organizaciones en un mitin en el centro de la ciudad de Ica.
Juan H. Pévez, líder de la rebelión campesina, no se encontraba en el pueblo de Parcona, él estaba en su pequeña propiedad, eran las doce del día y al compás del repique de campanas y sonidos de disparos llega el Prefecto a Parcona, eran las doce del día, la reunión debía de empezar a las dos de la tarde, se había adelantado con la finalidad de impedir la reunión. Para darse valor había bebido harto pisco, estaba borracho, lo acompañaba una comitiva numerosa compuesta por: dos automóviles, una camioneta, un omnibús, un camión y un contingente policial. Al llegar al local de la reunión, inmediatamente dispuso que la policía ingrese a las casas y aprese a todo campesino que encuentre, sólo encontraban a ancianos, los mismos que fueron sacados, amarrados y arrojados sobre el camión. Las mujeres suplicaban pero cuando notaron la embriaguez del Prefecto se enardecieron. El Prefecto bajo del automóvil y ordenó que también amarren a las mujeres y las pongan en el camión. Los campesinos que estaban ubicados por precaución a cuatro cuadras de distancia, corrieron al lugar. El Prefecto al notar que se acercaban, ordenó abrir fuego. Las mujeres reaccionaron lanzándose sobre la policía para impedir los disparos. Por su estado de ebriedad, el Prefecto también disparaba sin control, diciendo: ¡cholos de mierda! un policía no pudo controlar su arma por la trifulca, motivo por el cual, salió la bala perdida con dirección a la autoridad, logrando impactarlo cayendo al piso. Alrededor de mil campesinos aparecieron en escena, logrando desarmar a todos los policías.
En Parcona todavía se logra escuchar por tradición oral, que el Prefecto herido fue conducido por las mujeres, hacia la actual calle, que lleva el nombre de la fatídica fecha (18 de febrero), en el lugar estuvo tirado agonizante, bajo el sol, aquella tarde el sol quemaba con mucha intensidad, pidió agua a las señoras, ellas estaban muy molestas por lo sucedido y querían darle un escarmiento, la cólera no permitía que en sus corazones albergara un poco de humanidad, luego de escuchar el clamor por tomar un poco de agua, Doña Natividad Paco, le respondió ¿Quieres agua? Borracho de M. y levantándose la falda, delante de todas y todos se acerco, se paró sobre el cuerpo tendido - decúbito dorsal – orinándose en su boca y diciendo ¿Quieres agua? ¡toma! ¡toma! . Otra calle de Parcona guarda la memoria de Doña Natividad. Se cuenta también que cuando los efectivos policiales iban a ser ejecutados en el interior del cauce La Achirana, apareció Pévez impidiendo la masacre. Los convenció diciéndoles que tal hecho agravaría la situación del los campesinos. Posteriormente se supo que los familiares del líder estaban detenidos, entre ellas su madre y hermanos, deseando evitar también, que se lleven prisioneros a muchos de sus compoblanos, se entregó a las autoridades, siendo sometido a crueles torturas. El Gobierno de turno envió sus tropas con dirección a Ica- Parcona, deteniéndose a más de 700 personas. Centenares huyeron a distintos lugares del país. Días después, la noche del 10 de marzo, el pueblo de Parcona fue incendiado en su totalidad. Dos años después Pévez fue declarado inocente, ya que, se esclareció que el autor del disparo, causante de la muerte del Prefecto fue el guardia Germán Quiroga. Juan Hipólito Pévez Oliveros, fue co - fundador del Partido Comunista Peruano y fundador de la histórica Confederación Campesina del Perú.
Abraham Valdelomar Pinto
Es el escritor que nos dejó muchas enseñanzas, a través de su obra transmite un mensaje de integración entre los pueblos. Creo que el mensaje más claro, fue su participación en la conformación de los Congresos Regionales, de conformidad a la Constitución de 1919, resultando elegido diputado por Ica. Llegando a morir en Ayacucho, lugar a donde había viajado para representar a su tierra. Con ello demuestra que estuvo de acuerdo en unir la costa con la sierra y la selva, ya que, Ayacucho cuenta con parte de selva. A pesar de haber dicho “El Perú es Lima”, deja muchos escritos relacionados a la nostalgia y añoranza al terruño, a la Provincia. Valle Riestra. Ha dado opinión después de tantos procesos de Regionalización y descentralización de nuestra Patria: “Nuestra regionalización debió ser como la planteó el sabio Pulgar Vidal, una transversalización en que partiendo del mar territorial – enriquecido con los cincuenta y seis ríos que bajan de los andes – ganaremos los pisos ecológicos andinos hasta descender a la baja y alta sierra". El último referéndum para integrar las Macro – Regiones fue en el 2005, lo recuerdo con tristeza, las radios y televisoras locales se llenaron de chauvinismo, mejor dicho racismo, llegando a decir incluso, que si nos uníamos con Ayacucho, se iban a llevar al Señor de Luren a Huamanga. La campaña de la no integración estuvo dirigida por un hacendado, nacido en Paris. Todo hace indicar que los señores de la clase alta iqueña, temían que nuevamente salga elegido un nacido en la sierra como Presidente Regional, tal como sucedió a finales del primer gobierno aprista, siendo disuelto el proceso de regionalización por Fujimori después del autogolpe, nombrando a los Presidentes Regionales a dedo, en los tristemente recordados Consejos Transitorios de Administración Regional (CTAR)
El mismo Abraham Valdelomar escribe así en su cuento “Yerba Santa”: “Recuerdo vagamente como se recuerda el sueño, el día de “Jueves Santo”. Era el día del Señor de Luren, el patrón de mi pueblo. Durante muchas semanas antes, empezaban a llegar a Ica las ofrendas de todos los pueblos comarcanos; de los hacendados espléndidos de ese y de otros valles. Los ricos hombres de Cañete solían llevar, en persona, haciendo lenguas caminatas, el presente de sus corazones agradecidos al señor. Caballeros en potros briosos, brillantes, ricamente aperados, llegaban los señores dueños de grandes haciendas; desfilaban por las calles montados a caballo “de paso” de grácil andar femenino”.
Durante mucho tiempo se ha puesto a Pisco, como el lugar de nacimiento del más grande escritor Iqueño. En un libro llamado “Manual para el docente de Comunicación 1”, concebida, diseñada y desarrollada por Santillana S. A. Cuya Primera edición salió en febrero 2008, con un tiraje de 28,729 ejemplares, en la página 209 dice textualmente: “La bella ciudad iqueña de Pisco no solo es la cuna del famoso aguardiente conocido como pisco, sino también la ciudad donde nació el notable escritor Abraham Valdelomar”. El citado libro con la información errónea, fue entregado gratuitamente a los alumnos de las Instituciones Educativas públicas, por el Ministerio de Educación.
Como los poetas, están hechos de futuro, Valdelomar vaticinaba un centralismo fuera de lo común en el Perú, muy diferente a los países andinos o latinoamericanos. Lo escribe ya que vivió en carne propia, lo que es dejar la familia o los recuerdos de infancia e irse a aportar en la capital como lo hicieron: Vallejo, Mariátegui, Arguedas y tantos otros que llegaron a Lima a cristalizar sus sueños. El texto que a continuación transcribo pertenece al primer capítulo de Yerba Santa.
I
Oye Manuel- le preguntamos un día - , ¿dónde está tu papá?.....
- En Lima…
- Y tú ¿por qué no estás con él?
Enrojeció, inclinó la cabeza morena y echóse a sollozar dolorosamente. Corrimos donde mi madre:
- Mamá Manuel está llorando
- ¿por qué?
- Estábamos en el jardín. Jesús le preguntó por su papá y se ha echado a llorar…..
Mi madre nos dijo que no debíamos preguntarle nada sino quererlo mucho, porque Manuel “era un niño muy desgraciado”. Desde entonces cuando alguno de mis hermanos le molestaba, nosotros le decíamos en secreto:
- Oye; no le molestes. Dice mamá que debemos quererlo mucho porque Manuel es un niño “muy desgraciado”…
Y seguíamos haciendo surcos en el jardín.
En los últimos años de la década de los 90 (siglo XX) un grupo de jóvenes movidos por la poesía y las letras, florecían a través del movimiento Cultural El Conde Plebeyo, entre sus integrantes sobresale César Panduro Astorga, escritor que empezara a publicar desde el 2006. En su primera novela que publica en el año 2012, el personaje principal se enfrenta a un examen de creación literaria. La evaluación consistía en escribir tres cuentos, en uno de ellos desarrolla toda una conferencia sobre: “El Conde de Lemos”, el cuento lleva por título “El escritor Pisqueño es Iqueño”, la edición corresponde a la Editorial Magreb y el nombre de la obra es “Una Rosa junto a mi pie”.
José María Arguedas
Estudió el primero y el segundo año de secundaria (1926 y 1927), en la Institución Educativa San Luis Gonzaga. Por aquel entonces el claustro se ubicaba en el hoy Centro Cultural de la Universidad, a un costado de la Catedral. Muchos de los que hemos podido estar en ese recinto, lo imaginamos recostado al pie de los enormes ficus, que eran gemelos a los de la Plaza de Armas. “Yo era alumno del primer año, un recién llegado de los Andes y trataba de no llamar la atención hacía mi; porque entonces, en Ica, como en todas las ciudades de la costa, se menospreciaba a la gente de la sierra aindiada y mucho más a los que venían desde pequeños pueblos”. Su primera experiencia con la costa peruana lo vive en nuestra ciudad, entre la comarca que rodeaba la urbe, las dunas y muchos de los oasis que existían en Ica. Aquí también se enamora.
El pensamiento se expresa a través del lenguaje, siendo la palabra su forma más usual. En tal sentido las obras escritas por José María Arguedas exponen un mundo – el mundo andino – basado en su experiencia. El escenario del cuento OROVILCA es muy real, sobre todo cuando describe las lagunas de ese tiempo. Nótese su esplendor, de las nombradas sólo queda Huacachina. “La Victoria es la más pequeña; la rodean palmeras de altísimos penachos y el agua es verde, espesa; natas casi fétidas flotan de un extremo a otro de la laguna. Es honda y está entre algodonales. Aparece singularmente, como un misterio de la tierra”. Las menciona a todas. De Huacachina dice: es extensa y la rodean residencias y hoteles, para después manifestar:”Los largos caminos pavimentados, empedrados, me abruman. Y no me agrada Huacachina”. La ostentación humana me irrita”, Saraja, La Huega y Orovilca. Ésta última es la referencia literaria – el cuento Orovilca – que nos permite encontrarnos con muchos de nuestros elementos eternos y mágicos como el Chaucato y el Huarango.
Está narrado en primera persona (narrador testigo) comienza el cuento describiendo al chaucato “Es un genio benefactor y hermoso que encarna el agua fértil y fresca del subsuelo, o bien podría ser un príncipe o un genio antiguo del valle iqueño”. En el cuento el Chaucato es una metáfora del mestizaje, ya que lo describe como un ave emparentada con os chihuillos y el guarda caballo de la costa, y con el zorzal serrano. En relación al Huarango de retorcidos tallos, ramas horizontales y hojas menudas que se tienden como sombrilla dice: “Los Huarangos dejan pasar el sol, pero quitándole el fuego.
César Panduro en su obra citada líneas arriba, nos dice esto en relación a las lagunas:”La locura de regar más de lo que Natura permite, hizo que algunos hacendados, “dueños” de extensas áreas de tierra contiguas a los ojos de aguas, le metieron a sus cuerpos motobombas, succionando el encanto. Así secaron La Huega, Saraja, La Victoria…..Si las secó la codicia y la falta de amor por el futuro”
Revolución de Trujillo
Las acciones armadas realizadas por el Partido Aprista Peruano en el norte del Perú, tuvieron eco en el sur chico o centro, más no en el sur. El 7 de julio de 1932. Los apristas procedentes de la hacienda Laredo, encabezados por Manuel Barreto (a) “El Bufalo”, capturaron el cuartel O´Donovan en la ciudad de Trujillo, una parte considerable del los contingente subversivo, eran alumnos del colegio nacional de San Juan, armados de los fusiles del colegio destinados a ejercicios de tiros. Luego de innumerables acciones de Partido, en diferentes localidades, el ejército fusila a miles de apristas en Chan Chan.
Después de la muerte del presidente Sánchez Cerro en 1933 y la elección del General Benavides, quien tomó el mando bajo la invocación de orden paz y trabajo; calmaron un tanto las pasiones políticas. Benavides concedió amnistía general y restableció la libertad de prensa, los partidos políticos volvieron a actuar libremente y entre ellos el Apra obtuvo garantías para organizarse y operar en el país. (13)
Los apristas realizaban su labor política dentro de los locales de su partido, en los periódicos que editaban, en las universidades populares Gonzales Prada, en las manifestaciones políticas que realizaban en la capital. Considerándose la salvación del país (Solo el APRA salvará al Perú), tenían como propósito tomar el poder. La prensa aprista a través de sus ediciones preparaba la revolución. Tenían un plan revolucionario que debería estallar en toda la república en noviembre de 1934; pero sólo se sintió en Lima, Huancayo, Huancavelica, Ayacucho y posteriormente en Cajamarca.
En Ayacucho, al igual que en Trujillo participaron alumnos, en ésta oportunidad pertenecían mayoritariamente al Colegio Nacional San Ramón, encabezados por Arístides Guillen. Los días 26,27 y 28 los apristas colocaron su bandera roja en la Prefectura, se dedicaron a consolidar la revolución tomando prisioneros, nombrando autoridades y apoderándose del dinero de la tesorería fiscal. También lanzaron un comunicado dando a conocer que los departamentos de Junín, Huancavelica y Ayacucho estaban en poder de los facciosos y que el presidente de la republica había sido rodeado en palacio. El primer día de acciones armadas perdió la vida el guardia Manuel Matos Bonifaz, resultando heridos dos guardias. El día 29, Arístides Guillen Valdivia y sus partidarios, abandona la ciudad internándose en san Miguel para luego disolverse, no sin antes haber pedido al obispo de la diócesis “certificado de buena conducta revolucionaria”. Es exactamente así como se lee, obtenían los revolucionarios de la época su certificado, otorgado por la iglesia.
En Huancavelica
El jefe del movimiento en Huancavelica era nada menos que Cirilo Cornejo Gerónimo (1903), nacido en la Provincia de Huaytará, Región Huancavelica. Estudio en la Institución Educativa San Luis Gonzaga de Ica. Se graduó de abogado en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Estuvo catorce años en prisión y seis en la clandestinidad. Su primer encarcelamiento lo sufrió en el año 1923, siendo estudiante, llegó a ser Senador de la República (1946). En Ica se le recuerda por haber escrito el libro “Problemática de la irrigación en el Departamento de Ica”. En dicha obra se puede ver la cantidad de estudios o proyectos hechos para dotar de agua a Ica, dichos estudios ya se han empolvado en los archivos del estado, conociéndose sólo dos irrigaciones hechas en toda la historia de Ica: la primera, fue hecha por Los Nascas y tiene el nombre de “La Achirana”, la misma de la que habla nuestro ilustre Tradicionalista Don Ricardo Palma ( información tomada de María Teresa Oré), siendo su estudio valedero, puesto que, fueron los Nascas los que trabajaron el tema Hídrico en la Región. Y el otro proyecto se inició desde sus estudios en 1850, señalándose también que, derivar las aguas de la laguna Choclococha al río Ica tardo 109 años, ya que, se inauguró en 1959.
Cirilo Cornejo tuvo la colaboración de algunos guardias, con la complicidad de ellos, atacó a la Prefectura y se apoderó de los cuarteles de la Guardia Civil. Tomaron como prisioneros al comisario Teniente Luis Ponce, al cabo Fidel Mondragón, al investigador Pedro Manyari y al cura Ambrosio Ruiz del Valle, quienes durante los días de la revolución permanecieron en la Prefectura.
Los apristas salieron de Huancavelica el mismo día, dirigiéndose por la línea del ferrocarril y de la carretera a Ayacucho, punto estratégico y de vital importancia, para cautelar el movimiento en los dos departamentos de Ayacucho y Huancavelica, con su nuevo desplazamiento pensaban oponerse a todo avance de tropas provenientes de Huancayo y Lima. Tuvieron un enfrentamiento con las tropas de Infantería, en el sector Santa Rosa, resistiendo medio día, para luego huir del escenario bélico, dejando numerosas bajas. Los cadáveres de los guardias y el del cura Ruiz, fueron conducidos a Lima, por orden del Gobierno.
El boom agroexportador
El boom agroexportador
Se inicia, con la mirada visionaria de Don Alfredo Elías Vargas, en colaboración con otros agricultores. Superando el golpe que les dio la Reforma Agraria, forman una Asociación de Productores de Algodón y adquieren una desmotadora. Años más tarde llega a ser su presidente y la lleva al primer lugar a nivel nacional, entonces decide instalar una planta para procesar la pepa del algodón, fabricación de aceite y otros derivados de dicho insumo.
La pérdida del mercado del algodón y sus bajos precios obligó a los agricultores de Ica a buscar un cultivo de exportación más rentable. Con su liderazgo se inicia en Ica el cultivo del espárrago, instalándose una planta procesadora y empaque, introduce también tecnología alcanzando ser la primera planta moderna, exportando espárrago verde y fresco a los EE.UU. y a otros mercados extranjeros de Europa. El esparrago se convertía en el primer producto de agro- exportación en el Perú.
Se da cuenta que la utilización indiscriminada de las aguas subterráneas, nos iba a llevar a un camino sin salida en el campo. Hubiese sido interesante que tomará en cuenta lo dicho por nuestro querido Luis E. Valcárcel, él en su libro: “Ruta cultural del Perú ( 1945), recogió la sabiduría ancestral sin duda, y lo escribe en la primera edición del Fondo de Cultura Económica:"Si el serrano privaba del agua al costeño este perecía. Mas cuando el último logró un mayor dominio técnico supo defender su autonomía, construyendo depósitos y verificando captaciones de las aguas del subsuelo, maravillosas obras hidráulicas. Utilizó de los bañados e invento las “hoyas” (u ollas agrícolas), excavando el terreno arenoso hasta hallar la capa húmeda, que cultivo con positivos resultados”. Don Alfredo al darse cuenta que, desarrollar una agricultura moderna pasaba por la perforación de pozos y estos a su vez iban dejando sin agua a Ica. No tuvo otra salida y empezó trabajando ambiciosos proyectos de investigación para dotar de mayores recursos de agua a Ica: La derivación de las aguas del río pampas y Choclococha desarrollado son los más conocidos.
A finales de la década del los 90, y con el impulso de la nueva Constitución de 1993, llegan nuevas inversiones al campo, multiplicándose la perforación de pozos tubulares, aprovechando incluso la energía eléctrica para el bombeo. El presidente del Perú, ingeniero agrónomo de profesión, se da cuenta del auge y verdor del desierto Iqueño y envía a su hija, en ése entonces primera dama, a instalar “La Catalina”, “Agrokasa” y “Virgen de Chapi”. Muchas veces fue vista descendiendo de helicópteros, según cuentan los pobladores, llegaba a Ica a ver los trabajos de nivelación de terreno realizado con maquinaria del ejército.
Si haríamos un poco de historia, por aquí llegaron movidos por el trinomio agua, tierra y clima, los italianos en el siglo XIX, dedicándose al cultivo del algodón. A inicios del siglo XX, las haciendas más grandes de cabecera eran: Chavalina de los Elías, La Máquina de los Gotuzzo, Tacama de los Olaechea, Vista Alegre de los Picasso, entre otras. El resto era pequeñas propiedades agrícolas, con excepción de Tate, que era comunidad. A finales del siglo XX e inicios del XXI, se han apoderado de Ica, los Chilenos, teniendo plantaciones de uva de mesa para exportación.
El tema del agua se agrava en Ica, un estudio del año 1965, indica que habían 650 pozos tubulares en toda la Región (Nasca, Palpa, Ica, Pisco y Chincha). Actualmente están en funcionamiento sólo en Ica Provincia 1760 pozos, son perforaciones sin licencia en un 80%, las áreas agrícolas han vencido al desierto, irrigando con millones de metros cúbicos de aguas subterráneas los productos de exportación; pero el 80% de la población rural tiene racionamiento de agua (por horas), los más pobres no tiene acceso al agua potable. Se habla mucho de desarrollo económico, sin embargo, ello no repercute en las familias pobres, que han poblado los cerros de arena.
Generación dos mil en la Literatura Iqueña.
La generación dos mil viene a encontrar su nido en la Ica de Valdelomar, bebiendo de su gran espíritu creador y recogiendo muchos de los postulados, expuestos en todo el país a través de sus conferencias. A decir de Don Alberto iba desasnando al Perú, Jesús Cabel, en su ensayo “Memoria de sol” escribe: “En la poesía de Valdelomar, encontramos también otros elementos esenciales: madre, hogar, Dios y patria”. Estamos pues ante un trío de poetas ya consagrados, sus trabajos van siendo publicados desde el año 2,002 en antologías del Perú y el extranjero, en todos ellos encontramos los mismos elementos que señala Cabel, refiriéndose a Valdelomar.
Dos de ellos no nacieron en Ica, llegando a ésta ciudad por una misma ruta, la que ingresa por Nasca, por donde vino José María Arguedas proveniente de los andes, allá aprendieron el amor a la naturaleza y la necesidad de encontrarla paz, ya que, nacieron al mismo tiempo en que estallaba una guerra, desplazándolos con toda su familia a la tranquila ciudad de Ica. NAVALE QUIROZ CANO (Apurimac 1980) y HELMUT JERÍ PABÓN (Coracora 1982), exponen en su pluma el anhelo de paz y el recuerdo imborrable de su niñez. La penúltima gran migración hacia Ica (producto de la violencia política), nos trajo a dos grandes escritores, cargando sus sueños y esperanzas. En una especie lírica, Helmut nos devuelve al último episodio doloroso de nuestra historia.
Oda a la Paz
“Cuando nuestros hermanos se han ido ya
a la mala elevemos plegarias sollozantes,
quejumbrosas y queremos hallar si quiera
un pedazo de piel pero no, el anfo ha disuelto
hasta sus huellas”
Navale, siente la necesidad de integrarse a algo que exista más allá de sus recuerdos, algo que sólo esté perdido…….
Perdido
“Te busco en mis lados convexos
En mis cóncavas esquinas
Entre las líneas de mi mano
Que esperan al destino
Para hallarte.
Cargo y recargo tu imagen
Cargo y recargo tu recuerdo”
CÉSAR PANDURO ASTORGA (Ica 1980), completa el triángulo literario llamado generación dos mil en Ica, al igual que Helmut ha incursionado en la narrativa, siendo sus libros una constante alabanza a la naturaleza; pero también de análisis social, sobre todo de sus jóvenes personajes. En su mejor cuento “Los ojos de Rodrigo” escribe: “La vergüenza no lo iba a dejar tranquilo, y para evitarla se mató. Pero no hubiera sido así, te hubiéramos entendido, tú solo tenías 15 años, ¿Por qué tomaste esa decisión? Te negaste a conocer otra boca, otra piel. Tú que eras tan serio, que aprendiste a reír por amor, no te dijeron que por amor también se llora. Dejaste a tu madre una herida que no cierra, arrojaste al recuerdo tus poemas. Esa noche pensé en tu tristeza Rodrigo, el mareo que sentí fue a causa de tu pena. Mientras yo trataba de dormir, tú querías morir”.
No es mi intención realizar un ensayo literario sobre estos jóvenes escritores, la intención de incluirlos es para que se entienda la nueva configuración social que tiene actualmente Ica. En el arte plástico, también ocurre lo mismo, los Ayacuchanos de la misma generación, que ingresaron por Palpa a Ica, se suman a lo nuevo de nuestra tierra, y para muestra menciono a Dante Guevara (Ocaña 1980). La Nueva identidad Iqueña se viene expresando en todas las artes, en la música el abanderado es el Grupo Antología, dirigido por Dilio Galindo, asomó al mundo musical con composiciones de Paúl Trejos Natural de Palco- Lucanas, retomando la herencia de los Nascas y Paracas, Dante se encuentra hurgando incluso el eoceno y paleoceno ancestral de Ocucaje.
CONCLUSIONES
Todo lo que acontecía en la costa norte, costa central y parte de la sierra colindante con Ica, ha repercutido por acá. Es bien cierto que siempre estuvimos integrados con Ayacucho, Huancavelica y Apurimac, además desde el inicio de la República formamos parte del Perú, el costeño y criollo. La prueba más clara es el papel que jugó Ica en la guerra de los Generales (Confederación Peruano – Boliviana); pero existen otras, como el papel de Don Domingo Elías en 1854 y la última elección presidencial, donde el sur llevó a la presidencia a Ollanta Humala. Ica, ya lo decía Mariátegui, es un pueblo que se esfuerza por ser costeño, heredero de la corona española, de la conquista, ahora de la Globalización. Por ello y en honor a nuestros antepasados debemos recoger la idea política lanzada hace más de una década “La creación de la República Chanka, que abarcaría los Departamentos de Ica, Ayacucho, Huancavelica y Apurímac hasta el río Pachachaca. Es una región bellísima desde playas hasta selvas, tiene todas las riquezas”. Refuerza la posición de Don Alberto Benavides Ganoza, el propio José Carlos Mariátegui al haber escrito: “El desarrollo de los centros productores de la sierra, depende de la salida al mar”. El río Pachachaca aparece bramando en “Los ríos Profundos”, sus aguas se van al Atlántico, pero sus ciudadanos se vienen con rumbo al mar pacífico. En los 80, estos lugares fueron la cuna del enfrentamiento entre peruanos (Ayacucho Huancavelica y Apurímac), de esos lares llegaron muchos que le cantaron a Ica, empezando por Arguedas, hoy las nuevas generaciones hacen lo propio y la muestra de ello son: Helmut Jerí, Navale Quiroz, Dante Guevara y Dilio Galindo.
En la actualidad, se encuentra prohibido la nueva excavación de pozos tubulares, la napa freática ha descendido a límites peligrosos, a tal punto que ya se mezclan con las aguas saladas, peligrando la agricultura. En pleno siglo XXI, la actividad fundamental de la Provincia de Ica, consiste en el trabajo de la tierra, urge la necesidad de traer agua al valle, mediante mega – proyectos de irrigación. Las cuencas Hidrográficas en la costa peruana avanzan hacia el sur, el agua de lluvia utilizada en Ica, proviene de Huancavelica. Teresa Oré V. ha manifestado algo que como iqueños nos preocupa: “El canal de la Achirana es uno de los legados culturales más importantes de Ica, pero no es considerado como un patrimonio cultural”. Si Huancavelica formaría parte de la República Chanka, no habría ningún problema en la ejecución de proyectos de gran envergadura. Podríamos reparar el daño ocasionado por el gran capital y defender las nuevas extensiones ganadas al desierto, con la finalidad de poner en práctica la energía colectiva de la población rural. Todo esto fue advertido hace muchos años. El Amauta al hablar de la gran propiedad y el poder político decía: “La agricultura de riego en valles formados por ríos de escaso caudal, ha determinado según esta tesis, el florecimiento de la gran propiedad y el sofocamiento de la media y la pequeña” (14).
El tema educativo, es el que nos convoca en esta oportunidad, y por ende la parte pedagógica que no está aislada de nuestra identidad, en tal sentido, muchos docentes que laboraron en la sierra sur del Perú, se encuentran trabajando en Ica, ellos volvieron mediante la reasignación docente, deberíamos aprovechar su experiencia de trabajo en pueblos bilingües y trabajar con ellos en el Diseño Curricular Regional. Debemos entender que los estudios lingüísticos de antroponimia, toponimia, zoonimia y vocablos recogidos en Ica, corresponden a la familia lingüística Aru. Se está perdiendo tiempo y dinero en la actualidad, debido a que, cada departamento incluyendo Ica, se encuentran elaborando su propia propuesta educativa. En la DREI (Dirección Regional de Educación de Ica) no están considerando el quechua; pero si el inglés considerado en el plan de estudios del Diseño Curricular Nacional. Rodrigo Montoya ya lo anticipó en el dos mil once: “El problema de fondo es pensar una regionalización educativa del país en la que se combinen los espacios geográficos, las lenguas y las culturas” (15). Soy docente y puedo dar fe, el 80% de mis alumnos tiene como padres a personas nacidas en la sierra (quechua hablantes) y un porcentaje no menor al 50% lo habla, es necesario desterrar la vergüenza que se tiene a una lengua tan bella y dulce, salir al frente con orgullo, nuestros alumnos necesitan conocer que el pensamiento se expresa a través del lenguaje, se puede pensar en quechua y escribir en castellano o inglés. Arguedas nos mostró el camino.
El asunto familia, está ligado últimamente a la permanencia prolongada de la madre en el centro de trabajo, sobre todo en las empresas agro exportadoras, las mismas que se han posesionado del desierto en Ica, por su esplendido clima. En ellas trabajan un número considerable de madres solteras, cuya necesidad de trabajo y mayores ingresos económicos motiva que laboren jornadas acumulativas, disminuyendo su presencia en los hogares. Incluso en el periodo de campaña son obligadas a trabajar de corrido toda la semana, de esta manera dejan a sus hijos abandonados, expuestos a riesgos contra su integridad física y psicológica - maltratos, violación sexual, actos contra el pudor, bullying – por el abandono moral y material. Menores que son dejados al cuidado de un familiar cercano o vecina(o), dichos alumnos son los que vienen sufriendo en su mayoría el acoso escolar, siendo sus madres trabajadoras migrantes en su totalidad.
La Ley 27360, de conformidad a la Constitución admite el despido arbitrario, siendo el salario de 26 soles insuficiente para el sostenimiento del hogar, resultando más grave aún, si es que es solo la madre quien cuenta con este trabajo. Hasta el momento dichos trabajadoras (es) no cuentan con un trabajo de calidad.
En el terreno ideológico, que tiene que ver con las decisiones políticas, ya que, son los Gobiernos Regionales los que tiene a cargo el sector educación, siempre se ha notado una mayoritaria militancia aprista en los gobiernos locales, y una inclinación izquierdista en la Universidad del estado, con algunas interrupciones, producto de la intervención en el gobierno de Alberto Fujimori. El APRA en la Provincia de Ica, así como en todo el país ha hecho gala de su anticomunismo, la izquierda también tiene sus problemas: El oportunismo y el sectarismo. En las presentaciones de los nuevos líderes juveniles se puede apreciar su alejamiento de la militancia partidarista, son jóvenes sin filiación. En el alumnado secundario su desconocimiento de los problemas sociales, la alienación aumenta, siendo absorbidos por el uso de juegos en internet, sin duda la eliminación de las materias como Economía Política, Filosofía y el no desarrollo de un curso como Historia Regional contribuyen a ello. Es bueno recordar que a finales de la década de los 70, época signada por una convulsión en América Latina, se pudo apreciar - al igual como en los años 30 en Trujillo y Ayacucho – a estudiantes secundarios organizados a través de círculos de estudios políticos.
En la actualidad, el Presidente de la Región (relativamente joven), milita en el PPC, habiendo estudiado en la Universidad de Lima, nacido en Chincha. Anteriormente el Presidente de la Región fue un Apurimeño. El actual Presidente salió elegido por impedir que un candidato del Fujimorismo tome las riendas de la Región, a pesar que su discurso estuvo dirigido a proyectos de irrigación como el de Inkahuasi. En la última elección al Congreso, los Fujimoristas obtuvieron dos representantes por Ica, siendo uno de ellos el candidato de las irrigaciones.
Al centrar mi mirada en la Provincia Ica, debo recordar que hasta 1940, año en se marcan las migraciones sobre Lima, Ica conservó un iqueñismo propio, una definida personalidad en el espíritu, algo que la arqueología nos enseño mostrándonos: Soniche, Tacaraca, las hoyas de Villacurí, los quipus de Ullujalla y Chulpaca. Las primeras manifestaciones artísticas de la Cultura Ica, fueron descubiertas por el Dr. Max Uhle en un lugar llamado Chulpaca. Al adueñarse España de su territorio, se aceptó su autoridad, habiendo manifestado su protesta en lo espiritual, prueba de ello es el retorno a las antiguas formas de expresión artística que a pesar de la dominación extranjera, ellos se empeñaron en conservar como índice de la existencia de su raza. Los ceramistas de Ica, también habían borrado de su estilo toda influencia Inca, restauraron su independencia artística. Por eso se dice: “ni en el incanato, ni en la conquista española pudieron subyugar el espíritu indomable hecho para la libertad en este remoto poblador iqueño”.
El historiador Antonio Zapata recuerda que su elección profesional se debe a que tuvo buenos profesores en esta materia, que ”llevaban a los alumnos a los lugares donde sucedieron los acontecimientos históricos, haciéndoles sentir que lo dicho en los libros no era asunto del pasado, sino que tenía que ver con su presente y futuro”. Todos los hechos relatados están cubiertos con violencia, injusticias y verdades también. Por ello es necesario tomar en cuenta la opinión de Jesús Casamalón él afirma:” todos los procesos históricos han conllevado violencia. Se habla de esta no para generar más sino para aprender a construir una sociedad justa y encontrar caminos para que no se repita, además de sanar las heridas”.
Bibliografía
- (1) Concejo Provincial de Lima – Edición antológica – Historia – 1959.
- (2) “Perú Pre – Incaico”, Del Busto, José Antonio, Obras escogidas, Empresa Editora El Comercio – 2,011.
- (3) “Ica y el Perú Precolombino”, Pezzia Assereto, Alejandro. Empresa editora Ojeda S. A. Ica, 1968.
- (4) Diccionario de Derecho Canónico, Librería de rosa y Bouret, Paris – 1867.
- (5) “Origen y Fundación del Colegio e Iglesia de San Luis Gonzaga de los Jesuitas de Ica” Alvarez Quijandria, Cornelio, Editado por “La Peña Pacheco Cabezudo”.
- (6) “Aquí Nació la Patria”, Conferencia Cívica, pronunciada el 31 de octubre de 1933, por el Profesor: Alberto Casavilca Curaca (historiador de la ciudad), Librería e imprenta Nieri – 1933.
- (7) “Historia de Ica”, Chalco Cueto, Rodolfo, Imprenta Multigraf, Ica- 2,012.
- (8) “La Historia en el Perú”, De la Riva Agüero, José. Primer panorama de ensayistas peruanos”, Editora latinoamericana, MCMLVIII.
- (9) “Historia del Colegio San Luis Gonzaga de Ica”, Pbro Br. P. Rossel Castro, Alberto. Imp. Carriano, Ica – 1959.
- (10) “Canción del Silencio”. Ramírez Chacaltana, Juan, Ed. Arteidea, Lima – 2,012.
- (11) “El Apóstol de Ica”. D. Tovar y R. Enrique, Compañía de impresiones y publicidad Enrique Bustamante, Lima – 1943.
- (12) “Republica sin Ciudadanos”. Flores Galindo, Alberto. Obras Completas, Tomo I y III.
Página
45
- (13) “Historia Policial del Perú en la República”. Merino Arana, Rómulo. Imprenta del Departamento de Prensa y Publicaciones de la Guardia Civil del Perú. – Lima.
- (14) “7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana”, Mariátegui, José Carlos. Biblioteca Amauta, Edición 49 – 1987.
- (15) “La Educación está perdiendo el rumbo”. Montoya Rojas, Rodrigo, UNMSM – 2,011.http://icarte.blogspot.com
www.dreica.gob.pe/
www.dreica.gob.pe/