El silencio no es una palabra escrita sobre una pared, es una canción solitaria con el viento que no se detiene en el medio de un infierno. Silencio señores grandes, que despiertan las historias. León Gieco.
miércoles, 24 de mayo de 2023
UN PERSONAJE LLAMADO PISCO
martes, 9 de mayo de 2023
ROMEO Y JULIETA
Romeo y Julieta
Argumento
La historia comienza en una mañana de verano en la ciudad
Verona, Italia. En plena calle se desata una trifulca entre los miembros de la
familia Montesco y los Capuleto. La pelea es interrumpida por el príncipe
Escalus, quien advierte a ambas familias que cualquier acto de violencia futura
entre ellas tendrá como castigo la pena de muerte. Seguidamente, el conde
Paris, se reúne con el señor Capuleto con el plan de contraer matrimonio con su
hija Julieta. El señor Capuleto argumenta que Julieta es muy joven todavía para
el matrimonio y le pide al Conde que espere a que la misma cumpla los 15 años.
Aprovechando la oferta, le solicita al señor Capuleto que organice un baile
formal para celebrar el acontecimiento. En ese interín, la señora Capuleto y la
nodriza de Julieta intentan convencer a la joven de que acepte contraer nupcias
con Paris.
En diferentes circunstancias, Benvolio habla con su primo Romeo
—hijo de los Montesco—, sobre su reciente tristeza. Benvolio cree que la
tristeza de su primo se debe al amor no correspondido de una joven llamada
Rosalina, quien es sobrina del señor Capuleto. En un momento, Benvolio le
informa a su primo Romeo acerca del baile familiar de los Capuleto, quien
acepta acudir sin invitación a la ceremonia con la esperanza de encontrarse con
Rosalina. No obstante, cuando Romeo está adentro del baile, se encuentra con
Julieta y se enamora perdidamente de ella.
Cuando termina el baile, en la secuencia conocida como «la
escena del balcón», Romeo se infiltra en el patio de los Capuleto y escucha
secretamente a Julieta, quien está en el balcón de su dormitorio. En esta
famosa escena Julieta admite su amor por él a pesar de la hostilidad entre su
familia y los Montesco. Romeo «toma la palabra», y se retira justo antes de que
la nodriza de Julieta llamara a la joven.
Con el transcurso del tiempo, el joven continúa viéndose con la
muchacha, hasta llegar al momento en que ambos deciden casarse. Con la
asistencia de Fray Lorenzo, quien espera reconciliar a los grupos rivales de
Verona a través de la unión de sus hijos, al día siguiente del juramento de
amor, los enamorados se casan en secreto.
Sin embargo, ofendido por la intromisión de Romeo en el baile
familiar, Teobaldo —primo de Julieta— reta al joven a un duelo. Romeo evade el combate.
Impaciente tanto por la insolencia de Teobaldo como por la «cobarde sumisión de
Romeo», Mercucio acepta el duelo, aunque resulta mortalmente herido y fallece.
Dolido ante la muerte de su amigo, Romeo decide retomar el
enfrentamiento y logra asesinar al primo de Julieta. A consecuencia de lo
anterior, el príncipe castiga a Romeo con el exilio de la ciudad, bajo amenaza
que si regresa, «sería lo último que haría en su vida». Malinterpretando la
tristeza de su hija, el señor Capuleto decide ofrecerla en matrimonio al conde
Paris, intentando convencerla de aceptarlo como esposo y convertirse en su
«feliz consorte». Al final, la joven acepta bajo la condición de prolongar la
boda, aun cuando su madre se niega terminantemente. Mientras tanto, Romeo pasa
la noche secretamente en la alcoba de Julieta.
Seguidamente, Julieta visita a Fray Lorenzo para pedirle
sugerencias ante la situación que pasaba, ya que no quería casarse con un
hombre que no ama. El Fray conviene en ofrecerle una pócima que la induciría a un
intenso coma con duración de cuarenta y dos horas. Una
vez que la joven acepta llevar a cabo el plan, el fraile le promete enviar un
mensaje a Romeo, informándole sobre su plan secreto, por lo que podría volver
cuando ella despierte. La noche anterior a la boda, Julieta ingiere la poción y
sus familiares, al creerla muerta, depositan su cuerpo en la cripta familiar.
A pesar de la promesa, el mensaje de Fray Lorenzo enviado por
Fray Juan, su compañero, nunca llega a Romeo y, en cambio, éste se encuentra
con Baltasar (uno de sus sirvientes), quien le informa de la repentina muerte
de Julieta. Frustrado ante semejante noticia, Romeo decide comprar un eficaz
veneno, antes de acudir a la cripta donde se encuentra Julieta. Al llegar, se
encuentra con Paris, quien momentos antes había estado llorando sobre el «cuerpo
inerte» de su amada. Creyendo que Romeo es un saqueador de tumbas, el conde lo
enfrenta, pero muere asesinado por Romeo, no sin antes decirle que su cadáver
debe ser colocado con el cadáver de Julieta. Convencido todavía que su amada
está muerta, Romeo procede a beber el veneno para morir al lado de ella. Al
despertar del coma inducido, Julieta se encuentra con los cadáveres de Romeo y
Paris en la cripta; Fray Lorenzo le pide a Julieta que huya, pero ella se
niega, incapaz de hallar una solución a tales circunstancias, determina
atravesarse el corazón con la daga de su esposo, muriendo abrazado de su amado.
Tiempo después, los Montesco y los Capuleto, acompañados del príncipe, se
percatan de la muerte de los jóvenes y del conde. Absorto por la trágica escena,
Fray Lorenzo comienza a relatar la historia completa del «amor prohibido» entre
Romeo y Julieta. Su revelación consigue terminar con la rivalidad entre ambas
familias y el señor Montesco y el señor Capuleto están decididos a construir
una estatua de oro de ambos.
sábado, 18 de marzo de 2023
ADEBAJO DEL PACAY (Gregorio Martínez - Nasca 1942 - 2017)
Co
jueves, 6 de octubre de 2022
Un cuento de Abigail López
MI HERMANA
El sol empezaba asomarse por los cerros, los gallos cantaban, el agua
recorría su rutina y la mañana amenazaba, abrazaba y extendía su mano por
todo el campo de eucaliptos, retamas, sunchus y miles de flores aromáticas que
cubrían las laderas de los guardianes del pueblo. Mayo Hurin tenía pocas casas,
era una hilera, una sola calle que llegaba hasta la Paccha, lugar donde la
gente humilde recibía el agua del nevado Carhuarazu.
Concepción, una niña de la Provincia de Lucanas, con 12 años sobre su espaldita,
era conocida como “Conce”. Ella alistaba sus dulces y cuadernos en su mochila
junto a su caputo (habas tostadas) para su lonchera, también vendía dulces, ya
que el desayuno que le servían era muy poco y tenía que repartirse entre 10
hermanos. Esta triste situación económica, esta necesidad la llevó a soñar,
conocer otros lugares, la niña había escuchado hablar de Ica, ciudad ubicada en
la costa peruana, era su sueño estar en Ica, tendría mejores oportunidades y
una buena calidad de vida para su futuro.
En el trayecto a la escuela el frio rozaba su cabello y su rostro se
enrojecía, todo el tiempo no dejaba de pensar en Ica, en lo genial que sería
estar ahí caminando bajo la sombra, porque si era “La ciudad del sol eterno”,
habrá mucho calor. Se deleitaba pensando en sus lugares: Huacachina, El cañón
de los perdidos, Orovilca, La plaza de armas, seguro también el desierto, ahí
todo el fuego abrazará mí inocencia. Cuando llegaba a pensar en la comida,
aparecían abundantes imágenes en su cabecita llegando a suspirar…
- ¡ay cielos! Tan solo de pensar en comida, se me derrite la lengua y mi
barriguita grita de hambre, decía.
Pobre niña, juguetona y tierna, teniendo que ayudar en la chacra de sus
padres para hacer parir a la tierra, obtener papa y poder sobrevivir. A su edad
jugaba con la yunta, cuando los toros descansaban trataba de abrazarlos y con
sus pequeñas manos les palmeaba la nariz.
A los 13 años, Concepción García Taquiri, emprendió su viaje a Ica, con la
intención de tener un futuro mejor, estaba ansiosa y triste a la vez, ya que
dejaría atrás a sus padres y hermanos(as), su amado pueblo de abundante flora y fauna.
Era una mañana de diciembre, la
lluvia logró mojar sus mejillas y limpiarle sus lágrimas, se despidió de mamá
cerca al riachuelo, a la salida de Chipao, lugar de los adioses. Los camiones
ya no podían avanzar hasta el pueblo, aquí los ríos son profundos y muy
caudalosos, escuchó decir a sus abuelos la última noche.
- Hijita de mi corazón, le dijo en quechua su madre.
- Mamay, me voy, sé que algún día volveré por ti, respondió
Conce.
En Ica, su vida cambió radicalmente, ya que trabajaba de día y estudiaba de
noche, lavaba ropa para unos señores de Santo Domingo, no pudo estar mucho
tiempo donde sus familiares, ellos necesitan más que yo, pensaba como adulta,
los domingos buscaba el río y casi siempre lo encontraba seco y lleno de
basura.
Cavilaba,
- Tengo que salir adelante, sí o sí, lo tengo que hacer por encima de los
ofrecimientos de los varones, que al verme desprotegida tratan de asustarme con
sus pretensiones. Me vine de mi pueblo y tengo que salir adelante. Además, allá
no había secundaria, aunque mis patrones se aprovechen de mi trabajo, aunque me
paguen poco debo continuar dando lucha a la vida, la consigna es trabajar para
vivir. Nunca me rendiré, siempre soñé con una casa, traer a mamá conmigo…
A los 15 años su corazón palpitó enamorado, rápidamente voló la ilusión al
recordar la promesa hecha a sus padres, tenía bien claro su objetivo, encontrando
apoyo en un primo pudo adquirir una pequeña carreta, comenzó a vender
emoliente, le pedía a papá por carta, que le envíen eucalipto blanco. Así avanzó
la muchacha de las trenzas negras, terminando de estudiar la secundaria.
Con el pasar de los años logró conseguir un terreno en San Martin de Porras
y logró darle vivienda, vestido y comida a sus hermanos, ahora cocina en un
restaurant de su propiedad, ya está por terminar la Universidad, dice que tiene
su enamorado pero yo no lo conozco, ojalá comparta el sueño de ella, si es
iqueño debe prepararse para conocer Mayo Hurin, mejor sería un paisano nuestro,
la quiero tanto. Hoy me mira mientras escribo, no sabe que estoy contando su
vida, soy su hermana número 10 me dice cada vez que me encuentra leyendo.
Logró cumplir su sueño mi inocente hermana, una inocente niña, que según
dice ha encontrado nuevos retos en esta acogedora ciudad, que crece y crece, borrando
los arenales para ser más ancha, matando lo verde y secándose de agua.
López Gómez
Abigail Isabella
1 “B”
jueves, 18 de agosto de 2022
CONFESIÓN, un cuento de Daniela Belén
CONFESIÓN
Ella lo abrazó, sus lágrimas
llegaron a caer al suelo, él no supo que hacer. Tenía 10 años trabajando en
medio de un arenal, nunca había escuchado la voz retenida de una niña, la
palabra encarcelada por parte de la familia y vecinos del Centro Poblado.
-
Llora, te hará bien hijita, le dijo
tembloroso
Luego vino un largo
silencio, los niños jugaban, era la hora del recreo, ellos estaban enfrascados
en un tema que no era ficción, hablaban de algo que no pudo ser portada de periódico. Llegando a casa pensó
que lo confesado por la niña era mentira y que el verdadero culpable de su
desdicha era su propio padre.
Después del Dengue y la
pandemia, habían empeorado las relaciones entre el padre y la madre, los
diálogos eran cada vez más tensos, la niña estaba habitando un infierno entre
los llanos candentes, territorio yunga. Ella vivió la etapa más hermosa de su
niñez en Qosqo, mantenía en su memoria las nubes blancas, la lluvia y su mejor
compañía era el río al cual iba con sus animalitos día a día. Ahora abrazada a
su perro Sultán cargaba una cruz, sostenía un excesivo peso, difícil de soltar,
el crucifico estaba atado sobre ella como las imágenes que colgaban como hilos
y no se separaban de su cabeza, las secuelas quedaron atrapadas en silencio
sobre su frágil mente.
El Maestro desde hace mucho
tiempo se relacionaba con la soledad, su última compañía fue la perrita Luna,
que murió de vejez. Fue enterrada bajo una planta de warango cuya producción se
asemeja al pelaje que tuvo en vida el animalito ; pero al igual que la planta
seguía siendo eterna por estos lugares, ya que caminaba por la ciudad detrás
del dueño dando pequeños saltos entre la vereda y la pista, encogiendo sus
orejas ante tanto ruido de las bocinas. El perrito también advertía en su
mirada los gritos de la gente, ellos peleaban por pequeñas cosas, la sociedad
estaba muy sensible, hombres y mujeres caminaban con el cuerpo separado del
alma, ante un pequeño ademán el otro escupía al suelo o la cara del prójimo. Él
se conoció con ella comentando un libro cuyo título era “Agua”, la eterna
conversación de las personas que aman a la Villa de Valverde, alguien dijo que
era un pueblo que buscaba agua sobre el arenal.
-
¿Crees
que el chaucato es el agua subterránea de Ica?
-
Pienso que sí, su canto sale del corazón, no
lo vemos pero lo sentimos, es el idioma de las profundidades, es poesía que
refresca al viento.
Ahora ambos sentían su
canto, se contagiaban del celeste cielo del mediodía, Ica ardía y esa rabia ante
tal afrenta crecía como la duna Saraja. Aunque el Maestro quiso denunciar el
hecho ante la autoridad educativa, fue impedido por sus propios colegas para
evitar el qué dirán. Le recordaron la frase: “Pueblo chico infierno grande”,
siendo amenazado por desconocidos cuando iba a sacar agua del pozo. La tierra
prometida aún no contaba con agua potable, siendo la única forma para
abastecerse del líquido elemento jalar un balde, que sostenían tres palos del
cual colgaba una rondana que chirriaba en el subir y bajar.
Ella, la inocente urpicha
venida de los andes contaba con trece años de edad, cuando tenía ocho reaccionó
ante la violenta arremetida de su tío con una mirada fija, sin cerrar los ojos.
En tono íntimo rezaba el padre nuestro, de esta forma se rompía el afecto
guardado, volaba en medio de una paraca y el dolor le golpeaba la cara. Pasado
unas horas llegó mamá a casa, la señora sospechaba lo que había ocurrido con su
hija y su hermano. De inmediato quiso ocultarlo todo para proteger en secreto
los hechos ocurridos en la sala, según la confesión de la niña fue mirando la
televisión, los relojes marcaban las cinco de la tarde, de un día que no podrá
olvidar en toda su vida.
El tiempo pasaba como las
nubes pasan al este, la amistad entre el Profesor y la niña no pasaba, al
contrario crecía a través de los libros, ella leía para evitar que las imágenes
de la violación aparecieran encima de sus ojos, ambos habían encontrado en los
libros la forma de evadirse de la realidad, cuando cerraba el libro se envolvía
en una melancolía, por eso evitaba leer en las noches, se despedía del libro a
la hora en que el sol se ocultaba entre las dunas, entonces, en ese momento, el
canto de los grillos tomaba por asalto el inmenso arenal camino a Comatrana.
Una tarde después de sus
labores decide llevar la confesión al padre de la púber, el padre sorprendido
por la presencia del Profesor en su casa decide escucharlo.
-
Algo de lo que me dice, lo siento en el
corazón al ver la truncada felicidad de Urpi.
-
Lo siento amigo, no debieron ocultarle nada y
oportunamente recibir ayuda todos en el hogar.
-
Me siento culpable al no proteger a mi niña,
nunca debí abandonarlos.
La madre ausente y la niña
sumergida en sus lecturas, no pudieron enterarse ni contener la ira del señor
Darío Pomasoncco, quién creyendo en la versión del Maestro salió en busca del
cuñado con el machete en mano. La tarde enrojecida por la muerte buscaba
descanso en el desierto, muy cerca de la playa se desataba una tormenta para
seguir ocultando los hechos, el machete fue dejado al lado de la cabeza del
difunto en un hoyo más profundo. Mientras que el cuerpo, gracias al viento, se
desenterraba para ayudar en la putrefacción, pudiendo ser visto desde la
carretera.
Ella lo abrazó, sus lágrimas
llegaron a caer al suelo, él no supo qué hacer. Tenía 15 años trabajando en
medio de un arenal.
-
Llora, te hará bien hijita, le dijo
tembloroso.
Seudónimo:
Ave de abril
viernes, 17 de junio de 2022
Polémica por narradores criollos y andinos en un nuevo libro de Mark Cox
Por Francois Villanueva Paravicino
En junio pasado se ha publicado en una editorial ayacuchana el último libro del crítico literario estadounidense, Mark Cox, Prosa pituca peruana y la guerra de los años 80 y 90 (Editorial Amarti, 2019), que, por la calidad de las investigaciones, el renombre de investigador del autor, y la vigencia de un tema que parece no extinguirse así por así (el conflicto entre narradores criollos contra narradores andinos que surgiera en aquel I Congreso Internacional de Narrativa Peruana, 1980-2005), no pasó desapercibida entre la academia y los investigadores de la crítica literaria peruana.
El autor, que ha centrado la línea de sus investigaciones literarias en torno a la literatura producida en la época del conflicto armado de los años 80 y 90 de nuestro país, o que, simplemente, han abordado dicho contexto histórico, ha afirmado que ha podido registrar un total de 306 cuentos y 68 novelas por 165 escritores que hicieron literatura con las experiencias vividas, oídas o estudiadas; es decir, de aquel fenómeno que tiene al informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), como el documento más completo de testimonios, denuncias o quejas, etc., por parte de los sobrevivientes a dicha guerra interna.
Sin embargo, como todo intelectual cabal (heterodoxo, crítico y culto), Mark Cox cuestiona en ciertos puntos dicho informe de la CVR, especialmente concerniente al caso del escritor y autor del mítico libro Los ilegítimos, Hildebrando Pérez Huarancca; a quien las autoridades judiciales han acusado de haber sido el dirigente senderista que ordenó la ejecución de pobladores en la masacre de Lucanamarca, basándose, según el crítico literario americano, en las afirmaciones de testigos de segunda mano y que no estuvieron el día que ocurrió dicha tragedia; es decir, que solo escucharon a otros pobladores dichas aseveraciones.
Sobre el plato de fondo que título al libro, Mark Cox toma postura por parte de los narradores andinos, desde su posición de ciudadano de las zonas sureñas de Estados Unidos, donde la pobreza y la discriminación por parte de los americanos de la zona norte, han sido una constante que él rechaza por humanismo ético y social. Ya recuerdo sus afirmaciones en el I Congreso Internacional de Escritores de Ayacucho y el Vraem, donde afirmó en el Centro Cultural de la Universidad San Cristóbal, que él creía que la literatura podía convertir a los lectores y a los seres humanos en mejores personas; es decir, con mayor conocimiento del mundo y de lo bueno, lo justo y lo bello.
El estilo del libro, basándose en una premisa de Pierre Bourdieu, es confrontacional; pues, como afirmó el teórico francés, en el campo de las producciones literarias existe un conflicto permanente por la toma y asunción del poder. Al respecto, Mark Cox recuerda, de manera didáctica, la foto simbólica tomada en el Hay Festival de Arequipa del 2018, con Mario Vargas Llosa sentado, y con cinco escritores, de los cuales tres estaban posando la mano en sus hombros (como Santiago Roncagliolo, Jeremías Gamboa y Renato Cisneros). Entonces también circuló la fotografía de Cronwell Jara (ganador del Premio de la Casa de la Literatura Peruana), con el editor ayacuchano Willy del Pozo, Marco García Falcón y otros escritores. Es decir, dos campos de intereses intelectuales luchando por captar la atención del público lector.
Sin embargo, los escritores que analiza con más detalle son los autores del círculo de poder hegemónico del mercado editorial, como Mario Vargas Llosa (Lituma en los andes), Alonso Cueto (La hora azul), Iván Thays (Un lugar llamado Oreja de Perro), Santiago Roncagliolo (Abril rojo). De la novela de Mario Vargas Llosa, rechaza la discriminación, falta de comprensión cultural y el carácter denigratorio del personaje Lituma, quien ve a los andinos como seres inferiores, primitivos y bárbaros. De la obra de Alonso Cueto, critica la falta de perfección formal y las técnicas narrativas pobres, entre otros. De Ivan Thays, aparte de la falta de perfección de la forma y escasos recursos estilísticos, cuestiona “las descripciones como imágenes postales de los paisajes provincianos que abordan”. Del premiado Abril Rojo, sostiene que con la finalidad de buscar “un público grande, terminan restándole calidad literaria”.
Por ello, la lectura de este libro es imprescindible para los críticos literarios en formación y los escritores que buscan asumir una postura ideológica, social, económica y política, que son, como afirma Pierre Bourdieu, los campos que están siempre en ebullición y lucha constante del día a día.
jueves, 9 de junio de 2022
PACO YUNQUE ( Cèsar Vallejo)
Entrada destacada
LA LAGUNA ENCANTADA
Ya está establecido que todos los pueblos de la costa peruana son milenarios, aquí se establecieron los primeros peruanos, antes que Los I...
-
El sueño de Serapio Flores En el distrito de Santa Cruz de Flores, existía un niño solitario llamado Silverio, él era bondadoso, tiern...
-
Foto: Ambar Gavilán La palabra Saraja proviene de dos voces quechuas: Sara = maíz y acja=chicha, es decir, lugar donde se prepara...